- La titular del Juzgado de lo Penal número 1 de Pamplona ha condenado a 3,5 años de prisión a un varón de 29 años, J.L., de nacionalidad marroquí y que tenía un asilo provisional, por un robo con violencia y lesiones que cometió en el barrio de Santa María La Real el pasado mes de enero. La magistrada ha decretado la sustitución de la pena de prisión por su expulsión inmediata del territorio español durante cinco años. El acusado, al que le aplican la atenuante de haber actuado bajo los efectos del alcohol, había ingresado en prisión el mismo día de haber cometido los hechos después de haber sido detenido en las inmediaciones por la Policía Municipal de Pamplona. Le constaban siete detenciones por diferentes cuerpos policiales.
Los hechos se produjeron a las 23.00 horas del pasado 10 de enero cerca del parque Tomás Caballero de la capital navarra. Allí, el acusado abordó a la víctima preguntándole por la hora y este sacó un teléfono móvil para responderle. En ese instante, el denunciante se lo quitó de las manos y la víctima trató de pugnar por el teléfono porque "no vale nada, es viejo y lo necesito". Incluso le ofreció 20 euros si quería algo. Sin embargo, el procesado, en lugar de devolverle el aparato, comenzó a golpearle sin cesar y le tiró al suelo, cayendo la víctima de espaldas. De esta forma, le quitó la mochila que llevaba e incluso el abrigo. Por los golpes recibidos sufrió la fractura de los huesos propios de la nariz y el desvío del tabique nasal, por lo que tuvo que ser atendido en el Hospital Universitario de Navarra. El herido acudió a un bar cercano a pedir auxilio y, al llegar los policías, arrestaron al autor de los hechos en las cercanías. Él no reconoció la autoría del robo, pero en el registro de la zona aledaña localizaron, dentro de un contenedor, la mochila y otros objetos personales propiedad de la víctima.
