Los perfumes son una opción muy recurrente para tener un detalle con familiares, amigos o con la pareja en fechas señaladas como cumpleaños, aniversarios, amigos invisibles, regalos de Navidad... Sin embargo, se trata de una elección bastante arriesgada, ya que un perfume es algo muy personal y no siempre es fácil acertar.

Cada perfume es único puesto que no todo el mundo percibe igual el aroma de sus ingredientes y además tampoco huele igual en todas las personas, sino que el pH de la piel hará que la fragancia en contacto con esta desprenda un olor u otro.  

El perfume es la seña de identidad de cada persona y dice mucho de cómo somos. Si bien es cierto que elegir un perfume es una decisión muy personal, los expertos de Nutritienda nos ofrecen unas pautas para que podamos elegir el perfume que más se adapte a nosotros. Para ello se basan en factores como el tipo de piel, el carácter, la edad, el sexo e incluso la ocasión. Los aspectos a tener en cuenta son:

1- La piel. El perfume dura menos en las pieles secas que en las grasas. Un truco para prolongar su perfume es aplicarse tras la ducha crema hidratante. De esta forma el aroma se fijará mejor. Para las pieles secas se recoiendan perfumes con mezcla de flores y frutas con base de almizcle, maderas y pachuli (Armani Si Passione, Polo Blue Parfum de Ralph Lauren..). Si tu piel es grasa, mejor que te decantes por un perfume suave, ya que si no al interactuar con la piel el olor podría ser demasiado intenso (Solo ella de Loewe, Terre D'Hermes...). 

Frasco de perfume de caballero para regalar. Freepik

2- El carácter o la personalidad. Las personas enérgicas y vitales suelen elegir perfumes fougère que evocan los olores del bosque o el olor a hierba recién cortada. Suelen contener lavanda, cumarina y musgo, son relajantes y pueden reducir el estrés y la ansiedad con aromas penetrantes pero frescos. Es el caso de Esencia de loewe, Agua Fresca de Adolfo Domínguez...

Las personas con carácter fuerte y perfeccionistas se decantan por los perfumes Chipre compuestos por plantas de allí como la bergamota, el sándalo y la vainilla que desprenden un olor entre dulce y amargo con toques amaderados. Son elegantes y conservadores pero con un toque atrevido, ideales para personas con carácter que no temen llamar la atención (Sisley Eau de Soir, Guerlain Mitsouko...).

Las personas con un temperamento más tranquilo y tímido tienden a elegir perfumes suaves y delicados para no llamar la atención. La intensidad del perfume va a depender de que sea eau de cologne (entre 2 y 4% de concentración), eau de toilette (entre 5 y 15%) y eau de parfum (entre 15 y 20%). Es el caso de Thé Vert eau de cologne de Bulgari.

Frascos de diferentes fragancias. Freepik

3- La edad. Los gustos van cambiando con la edad. En la infancia y juventud se eligen aromas más joviales y suaves. En la veintena, los cítricos transmiten más energía y frescura. A los 40 y 50 uno ya no se perfuma para gustar a otros sino para gustarse a si mismo por lo que se eligen aromas más tradicionales como los florales y otros más fuertes y elegantes, siempre con una tendencia hacia lo amaderado. Mon Gurelain o Le parfum de Yves Saint Laurent son dos buenas opciones.

4- La ocasión. Hay perfumes cítricos que levantan el ánimo, son refrescantes, estimulan y disipan el cansancio y son ideales para el día a día. Huelen a limpio y es el caso de CK One, Aire Loewe... Los frutales son dulces y frescos, transmiten alegría y se pueden usar en momentos de bajón para levantar el ánimo. El aroma a fresas y frutas del bosque puede revitalizar, mientras que el olor a melón, sandía o moras activa el buen humor y el optimismo. Destacan Amor Amor de Cacharel y Be Delicius de Donna Karan. Los orientales son ideales para momentos especiales ya que son exóticos, intensos, sensuales y con toques afrodisíacos (Solo Loewe o Dior Addict). Los perfumes gourmand son aromas cálidos y dulces que dan ganas de comérselos: chocolate, algodón de azúcar, chicle o caramelo. Dos ejemplos son La Vie Este Belle de Lancome o Prada Candy Florale.

5- El sexo. Hay perfumes unisex pero la mayoría son específicos para mujer y para hombre. Los florales son considerados más femeninos y se caracterizan por ser calmantes y relajantes. Su aroma se asocia al amor y a la seducción y suelen ser perfumes elegantes. En este grupo encontramos Chanel Nº5 o J'Adore de Dior. Los amaderados están más enfocados a los hombres. Son perfumes intensos y profundos y aportan a quien los utiliza un carácter seductor, sensual y misterioso.

Orígenes del perfume

El perfume surgió en Mesopotamia en el año 3.500 antes de Cristo y se utilizaba como incienso. Fueron los egipcios quienes comenzaron a usarlo a diario y lo convirtieron en una moda. Durante la Edad Media, los Cruzados trajeron a la Península Ibérica las materias primas y las primeras técnicas para elaborar perfumes. De esta forma el perfume ha acompañado generación tras generación a millones de personas independientemente de su edad, sexo, cultura o nivel adquisitivo.