Cerca de un centenar de personas asistió el miércoles 20 de marzo de 2024 al acto de entrega en el Palacio del Condestable de Pamplona de los premios del XX Concurso de Fotografía Mirar la Arquitectura de la delegación navarra del Colegio de Arquitectos Vasco Navarro (COAVN). En esta edición, que por primera vez ha acogido una categoría dirigida a menores de edad, Jesús J. Morrás Soria obtuvo el primer premio del apartado de adultos por su imagen En la obra; Juan Otero ganó en la categoría juvenil por Infinito, y Mía Salvador lo hizo en la infantil por La calle oscura.

El espacio cultural de Casco Viejo pamplonés exhibe ya los 75 originales presentados este año al certamen, además de la exposición Otras arquitecturas, dedicada al arquitecto Pau Casanny.

Las/os premiadas/os

De la fotografía alzada con el primer premio, titulada En la obra, tomada por Jesús J. Morrás Soria, en la Torre de Salesianos de Pamplona, el jurado ha valorado muy positivamente la ejecución y la composición de la imagen. "Destacamos la mirada del autor hacia una temática menos común. Con pocos elementos consigue, de una escena intrascendente, presentarnos una imagen de gran valor estético. Los dos grandes pilares enmarcan con fuerza la obra y contrastan con los elementos más livianos del centro, dando estos un toque de color sutil que crea una armonía visual muy interesante", afirman.

'En la obra'. Jesús J. Morrás

El segundo premio fue para Raquel Cabrerizo Erlantz por Aqua Lumen, tomada en el centro recreativo Guelbenzu. "El mayor atractivo de esta imagen radica en el uso expresivo de la luz y el color, así como en una composición compleja, pero resuelta de manera armónica. El uso de colores complementarios, azules y ocres, con un acento de color en rojo, con las masas de color bien equilibradas en el cuadro, la superposición de líneas diagonales de la luz incidente con las ortogonales de la arquitectura que muestra… Todo ello conforma una imagen de gran potencia plástica que nos propone una experiencia sensitiva de la imagen arquitectónica", comentan desde el jurado.

También hubo dos accesits, para Jorge Almeida Vela por La huerta (Cascante), y para Blanca López Larramendi por Arquitectura vernácula. Puesto Palomo (Ilarratz). Y cinco finalistas: La muralla, de Jesús Sierro Ríos (Pamplona); Transparencias, de Alberto Elía Pitillas (Polígono Landaben); Diálogos, de Daniel Andión Espinal (Calle Virgen de la Cabeza, Tudela); Cremallera, de Eric Almeida Dávila (Colegio público Paderborn-Lezkairu, y Unidad vertical, de Jesús Blanco González (edificio Cruz Roja con torre de Salesianos).

Juvenil

En la categoría juvenil, ganó Juan Otero Fernández (Pamplona, 17 años), por Infinito, tomada en biblioteca pública de la plaza de Yamaguchi. El jurado valora la composición de la imagen y la ejecución de la misma. "El equilibrio de la fotografía y el control de la luz son muy importantes para hacer de un elemento sencillo algo con tanto interés. Destacamos también la búsqueda de la alineación de todos los elementos para conseguir esa profundidad de campo con una escala cromática muy sencilla", señala.

'Infinito'. Juan Otero

Alto voltaje, de Leire Andión Martínez (Pamplona, 16 años) quedó en segundo lugar. "Se trata de una abstracción plana que conjuga los motivos arquitectónicos con los juegos de luz y sombra, construyendo un juego simbólico de gran interés. La sombra de los árboles se transforma en corrientes eléctricas que atraviesan la superficie de hormigón. El uso de un color plano, casi sólido, completa la propuesta, que podríamos definir como gráfica, proponiendo así un acercamiento lúdico y simbólico al hecho arquitectónico", dice el jurado.

Infantil

En la recién inaugurada categoría infantil logró el primer premio Mía Salvador Osés (Burlada, 7 años) por La calle oscura, tomada en el Aquavox de la calle de la Merced de Pamplona. "Llama la atención del jurado la composición de la imagen, que con el recurso expresivo del giro de la cámara consigue un gran dinamismo. Se hace patente una gran intención en las decisiones fotográficas de la autora, con el uso del blanco y negro y la poca profundidad de campo, enfocando con acierto en el sujeto principal, en el que confluyen además todas las fuerzas compositivas del cuadro. Su mirada sobre la arquitectura contemporánea de la ciudad se transforma en una imagen de gran carga plástica impecablemente resuelta", indica el comité que decide los premios.

'La calle oscura'. Mía Salvador

Y Asier Pueyo Polonio (Pamplona, 10 años) ganó el segundo premio por Balcones, tomada en la Plaza del Castillo de la capital navarra. Para el jurado, es "una composición con pocos elementos que consigue transmitir la complejidad de la arquitectura urbana, así como de la mirada del paseante. Con pocos elementos cromáticos se nos presenta una imagen visualmente muy interesante. El autor también es valiente a la hora de decidir qué elementos se quedan fuera de la imagen, para centrarnos en la fachada, obviando las cubiertas o las plantas bajas".