María Asurmendi (04/04/1986, Pamplona), jugadora navarra del Araski de Vitoria de la Liga Femenina de baloncesto, se embarca, junto a la entrenadora navarra de baloncesto Oihane Ciruelos, en el proyecto Play Your Best. Esta idea, dedicada a “estar cerca de los jugadores y jugadoras navarros de baloncesto”, tiene como objetivo mejorar la experiencia de todos en este deporte. La considerada, por opinión popular, como la mejor jugadora navarra de baloncesto de la historia, comienza con un campus para niños y niñas de 6 a 17 años que tendrá lugar entre los días 27 de junio y 1 de julio en el colegio Larraona.

¿Cómo surge ‘Play Your Best’?

-Play Your Best nace de la idea inicial de hacer un campus en Pamplona. Esto lo tenía pensado desde la pandemia, pero una vez pasó todo no había visto el momento de hacerlo. Este año me decidí, no solo a convertirlo en algo real, sino a que la idea fuera más allá, que no fuera solo un campus. Hemos creado Play Your Best con la intención de ofrecer mucho más allá de una actividad de verano.

¿Qué persiguen con este proyecto?

- Todo está dirigido a estar cerca de los jugadores y jugadoras que quieran entrenar y mejorar su experiencia en el baloncesto. Después del campus seguiremos realizando servicios de tecnificación, asesoramiento deportivo, preparación física, formaciones y charlas.

¿Cuántas plazas hay cubiertas?

-Hay alrededor de 30 personas. Ha salido un buen grupo de niños y niñas de 12 a 17 años. No queríamos que el ratio de jugador por entrenador fuera muy alto, porque así habrá un trato más cercano y la experiencia será muchísimo mejor para todos.

Ya han presentado varios invitados, ¿quedan muchas sorpresas por desvelar?

-Pues espero que sí. De momento hay una ya confirmada que anunciaremos próximamente y otra más que está por ver. Pero bueno, en estas cosas siempre hay sorpresas de última hora y puede ser que se sume más gente. De todas formas, viendo las personas que van a venir, estoy mucho más que satisfecha con el cartel que hemos conseguido. De momento tenemos referentes del baloncesto como Laura Quevedo, Irati Etxarri, Naiara Díez, Silvia Domínguez, Ricardo Úriz, Aitor Alonso y Anne Senosiain.

Fue elegida como la mejor jugadora navarra de baloncesto de la historia, ¿a qué le suena eso?

-Bueno, siempre digo que me parece un poco exagerado. Me lo tomo como una gran muestra de cariño porque, al final, se trataba de una votación popular y es un orgullo que la gente de tu tierra te elija como la mejor, pero eso yo creo que es algo desmesurado.

¿Quiénes son las mejores para usted?

-No me suele gustar dar nombres porque siempre hay alguien que se queda fuera y eso me sabe mal. De todos modos, si tengo que decir algunas jugadoras diría Reyes Castiella, que es una en las que me fijaba cuando era más pequeña, era una de las referentes de entonces. También diría Naiara Díez o Irati Etxarri. Pero bueno, seguro que me dejo a grandes jugadoras.

¿Cómo está en el Araski? Le queda un año de contrato.

-Estoy bien. Todavía no puedo hablar mucho del futuro porque no hay nada cerrado. Cuando sea el momento de comunicar mi futuro ya se hará, pero aún es imposible decir qué va a pasar.

¿Le gustaría volver a Pamplona?

-Por supuesto, me gustaría mucho volver a jugar en Pamplona al máximo nivel, sería un orgullo porque al final es mi ciudad. Por ejemplo, cuando estuve en el Unión Navarra Basket fueron unos años muy bonitos. Jugar en tu ciudad, con tu gente y a un nivel alto es siempre bienvenido.

¿Cuánto va a aguantar el cuerpo de María Asurmendi?

-Tengo bastante cuerda todavía. Yo quiero seguir jugando, mi cuerpo de momento aguanta bien y el día que no, decidiré qué hacer. Iré viendo temporada a temporada, no miro a largo plazo, pero mientras aguante seguiré al máximo y disfrutando del baloncesto.

¿Cómo se ve en cinco años?

-La verdad es que me gustaría poder decir que he seguido disfrutando muchos años del baloncesto como jugadora profesional. También me gustaría ver que Play Your Best ha despegado, ha crecido y que todas esas ideas y esas ganas de aportar baloncesto a los jugadores y jugadoras navarros ha tenido acogida y funciona. En resumen, en cinco años me gustaría poder decir que sigo disfrutando del baloncesto.