Un gol de penalti de la barcelonista Fridolina Rölfo, en la primera mitad, y otro de la exmadridista Kosovare Asllani, tras el descanso, dieron a Suecia la victoria ante Australia (2-0) y el bronce en la Copa del Mundo femenina, el cuarto de su historia. Suecia se impuso en un duelo en el que fue superior, a pesar de los picos de intensidad de Australia. Lo que pudo ser un gran festejo del coanfitrión terminó siendo una fiesta sin música en la que la afición y las oceánicas se fueron desinflando poco a poco.