Los Beckham acaban de aterrizar en Netflix con un nuevo documental que repasa tanto la trayectoria profesional como la vida de David, y en el que su mujer, Victoria, se sincera sobre algunas de las etapas más duras de su vida, entre ellas, el difícil episodio que vivió cuando residía en Madrid tras una supuesta infidelidad del futbolista con la que fuera su asistente Rebeca Loos. 

Entre 2003 y 2007, David Beckham militó en las filas del Real Madrid, una época que no fue nada fácil a nivel personal ni para él ni tampoco para Victoria, especialmente por el desagradable episodio protagonizado por Rebeca Loos, la que fuera su asistente personal, que narró públicamente los supuestos encuentros sexuales que supuestamente había tenido con el futbolista, y recibió grandes cantidades de dinero por romper su silencio en medios de comunicación extranjeros.

VICTORIA BECKHAM SE SINCERA: “FUE LA PEOR ÉPOCA DE MI MATRIMONIO”

Victoria Beckham recuerda aquellos años con especial dolor, tal y como ha confesado en el documental de Netflix. 

"Fue la peor época del matrimonio. El mundo nos atacaba y estábamos el uno contra el otro. Hasta Madrid, estábamos juntos; luego, no sentíamos el apoyo del otro. No puedo describir cómo nos afectó. Nunca en mi vida había sido tan infeliz", explica la ex Spice Girl, sobre el momento en el que se vio obligada a oír un día tras otro con todo lujo de detalles que su marido tenía una amante y los encuentros sexuales que supuestamente había tenido con ella. 

Rebeca Loos, la supuesta amante, no tuvo reparos en contar cada detalle de esos supuestos encuentros a cambio de grandes cantidades de dinero: el periódico 'News of the World' le pagó casi 400.000 euros por contar su historia, mientras por su testimonio en la cadena de televisión ‘Sky One’ se embolsó 166.000 euros.

Hasta el momento, Victoria nunca había querido pronunciarse sobre el tema, y David lo negó todo en su día, ahora tampoco confirma el ‘affaire’, aunque reconoce que él también lo pasó muy mal entonces: "Victoria es todo para mí, el verla herida fue increíblemente difícil, pero somos guerreros y en ese momento necesitábamos pelear el uno por el otro, necesitábamos pelear por nuestra familia. Y teníamos algo por lo que valía la pena luchar", asegura el exdeportista.