Los golfistas José María Olazábal, Carlota Ciganda y José Manuel Carriles han rendido este miércoles homenaje a su compatriota Severiano Ballesteros jugando los 18 hoyos que diseñó en Santa Marina (Cantabria), que le ha puesto el nombre de Seve a la calle que da acceso al campo y le ha nombrado socio de honor a título póstumo.

Sobre las 9.00 horas tenían la salida estos tres golfistas, a los que se ha sumado el presidente de la PGA, Ánder Martínez, para jugar el campo de Santa Marina, muy técnico, como comentaban algunas de las más de 200 personas que no han querido perderse este partido.

"Es como estar en familia", ha asegurado en rueda de prensa Olazábal, en referencia a sus acompañantes, antes de señalar que "siempre es especial recordar a Seve, y una aliciente extra jugar en un campo diseñado por él".

Olazábal ha elogiado una vez más a su amigo Seve, del que ha destacado su "genialidad" y "una imaginación extraordinaria", y al que ve una figura muy difícilmente repetible. "Son jugadores que se cuentan con los dedos de una mano", ha afirmado

La navarra Carlota Ciganda ha reconocido que se sentía identificada con Seve porque, al igual que el golfista de Pedreña, tuvo una época en la que no era capaz de dejar la bola en la calle desde la salida, pero luego lo arreglaba con un golpe "extraordinario", lo que era marca de la casa en el cántabro.

"Yo me veía un poco como él", ha dicho la golfista, quien considera que "la garra y lucha" de Severiano era "algo único" y cree que por eso es tan querido en Reino Unido.

Con diez u once años conoció José Manuel Carriles a Seve, cuando éste estaba entrenando en el Real Golf de Pedreña.

Carriles le pidió a su madre quedarse viendo cómo tiraba bolas el tres veces ganador del British Open, y éste se acercó a hablar con él. "Fue inolvidable", agrega.

Parecido le ocurrió al presidente de la PGA, que en su primer encuentro compartió cinco minutos con Seve, quien le dio consejos para mejorar su golf. "Fue un momento mágico", subraya.

Todo el acto de homenaje ha estado presidido por el trofeo de la Solheim Cup -equivalente a la Ryder femenina- que está de gira por España debido a que en 2023 tendrá lugar en Finca Cortesín (Málaga), y que tanto Carlota Ciganda -más que posible jugadora del bando europeo- y Olazábal, que ha ganado la competición masculina como jugador y capitán, confían en que tenga el mismo impacto que la de 1997 que Seve "trajo" a España.

De hecho, Seve Ballesteros y José María Olazábal son la pareja más exitosa de la historia de la Ryder, con 12 puntos y un récord de 11 victorias, 2 empates y 2 derrotas.

"Hizo un esfuerzo tremendo por popularizar el golf y estaría muy orgulloso de esta Solheim", ha afirmado.

Tras finalizar la rueda de prensa, los jugadores han tenido tiempo para comer y, después, se ha descubierto la plaza que da el nombre de Severiano Ballesteros a la calle que lleva a este campo de golf, como parte del homenaje que ha ofrecido el campo.

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Santa Marina ha nombrado a Seve socio de honor al club a título póstumo. "Es lo menos que podemos hacer", ha señalado a EFE su responsable, Mariano Saiz, quien ha explicado que el golfista de Pedreña está "representado al cien por cien en este campo".

"Lo hizo como le dio la real gana. En el campo se refleja su persona, su juego y su carácter", ha apostillado.