El jefe del grupo de mercenarios ruso Wagner, Yevgeni Prigozhin, ha asegurado este domingo que jamás firmará contrato alguno de colaboración con el Ejército ruso, en lo que, se supone, es un requisito imprescindible para la integración de combatientes "voluntarios" en las filas.

En una nueva muestra de su distanciamiento con el ministro de Defensa, Sergei Shoigu, Prigozhin entiende que esa orden solo atañe a los combatientes dependientes del Ministerio, y no de su grupo, antes de asegurar que siempre cumplirá las órdenes de Vladimir Putin como presidente de Rusia y comandante de las Fuerzas Armadas.

"Wagner está absoluta y completamente subordinado a los intereses de la Federación Rusa y del Comandante en Jefe", ha hecho saber Prigozhin este domingo en su canal de Telegram, en el que ha reiterado además que Wagner ha actuado siempre en coordinación con los generales Sergei Surovikin y Valeri Gerasimov, quienes en los últimos meses han liderado las operaciones de la invasión rusa de Ucrania.

Cabe recordar que, este pasado sábado, el Ministerio ordenó a las unidades de voluntarios que firmaran contratos antes del 1 de julio como un "esfuerzo por proporcionar el estatus legal necesario y extender la protección social y las medidas de apoyo a los voluntarios y sus familiares".

"Desafortunadamente, la mayoría de las unidades militares no tienen tanta eficiencia, y precisamente porque Shoigu no puede manejar formaciones militares con normalidad", ha afeado Prigozhin.

"Por lo tanto, el hecho de que redacte decretos u órdenes se aplica exclusivamente al Ministerio de Defensa y a quienes están dentro del Ministerio de Defensa", ha reiterado.