Manuel Díaz, El Cordobés, hijo del sempiterno Manuel Benítez, El Cordobés, dijo adiós (con mala pata) de la profesión en Navarra en la decana de las plazas de toros, la de la ciudad ribera de Corella. El mismo gesto y en el mismo ruedo protagonizó otro popular, Jesulín de Ubrique, aunque, luego, reapareciera con más necesidad que fuese en varias ocasiones. En esta ocasión la función no era, como es muy habitual, la que echaba el cerrojo a la temporada por estos lares forales, porque hoy en Sangüesa se dará la novillada suspendida en sus pasadas fiestas y en la que actuará el novillero pamplonés Bruno Martínez ante erales de Emilio Galán Trilla y compartiendo cartel con Luis Rivero y Pablo Polo.

El mexicano Joselito Adame encontró una gran complicidad con los jóvenes de sol. | FOTO: M. SAGÜÉS Manuel Sagüés

La materia prima corrida lució bonitas hechuras para una ocasión de despedida mediática y plaza, de siempre, declarada torerista. Agradables juampedricos, algo también de Osborne e Ybarra, de la jienense localidad de Arroyo del Ojanco, donde se idolatra al toro con cuerda en la serrana inmensidad del mar de olivares.

Alzamos la copa para brindar por el torero que se retira, por modesto o dispar que haya sido, a los que también hieren los toros, también por El Juli, que se retira entre hoy y mañana; y por la Tauromaquia, da igual si es de barros y alfareros de aldea que si esa copa es de fino vidrio de la Real Fábrica de Cristales de La Granja.

El Cordobés abrió plaza ante el toro Comunero, con muy discreto saludo con el percal . Se le vio muy mal, mermado físicamente e intentando trampear con los engaños. Aceleró con la espada y fue volteado. Se levantó, dejó una estocada corta perpendicular y se fue para la enfermería. Ya no salió por la paliza. Fue trasladado al hospital de Tudela donde le están haciendo pruebas.

El diestro madrileño, que en la próxima feria de San Lucas de Jaén tiene prevista su retirada en los ruedos, se quejaba de dolores en "la parte alta del fémur", según ha confirmado a EFE su apoderado, el empresario Alberto García.

Por este motivo le están sometiendo a un estudio radiológico que confirme el alcance de la lesión, aunque a falta de los resultados el propio apoderado señalaba que "parece que solo ha sido el golpe". La preocupación por la posible lesión de Manuel Díaz se debe a que el torero lleva dos prótesis en las caderas.

EN EL RUEDO

La cosa restante quedó completa para Emilio de Justo y Adame, que repetían en Corella después de sus debuts y triunfos hace justo un año.

Emilio volvió a gustar a la parroquia por su clase y un mejorado poder, que ha mostrado ya en el último cuarto de la temporada. El primero de su lote fue un colorado chorreado, Juncoso, ante el que perdió una oreja por marrar con la espada. Al 5º, sí, le cortó las dos orejas en manufactura completa, de clase y mandona. Joselito, idolatrado un puntín a cariñosas risas por la solanera, se montó en su tesón y recursos para volver a salir a hombros. Menores prestaciones y clase, pero con capacidad.

Los toros

Guadalmena. Seis toros, todos cuatreños. Correctos de presentación para una plaza como la de la ciudad navarra. Encierro parejo y con defensas discretas; y justo de fuerzas y de casta Nobles, cuidados y sin brillo en el primer tercio. Colaboradores en la muleta.

Los toreros

El Cordobés. (De nazareno y oro). En el 1º, silencio. Cogido en un pinchazo previo a una estocada. Fue a la enfermería y ya no volvió. Heridas menos graves.

Emilio de Justo. (De tabaco y oro). En el 2º, saludos tras aviso. En el 4º, 2 orejas. y en el 6º, silencio.

Joselito Adame. (De azul marino y azabache. En el 3º, oreja tras aviso. En el 5º, oreja y petición de la segunda.

Las gradas

Presidencia. Bien a cargo de Gorka García Izal, asesorado por Gregorio Madurga Calvo (artístico) y Mendaza Martínez de la Fuente (veterinario).

Incidencias. Buena entrada (tres cuartos) y tarde calurosa.