Del 27 de septiembre al 1 de octubre se celebró el Campeonato del Mundo de Kenpo-Kai que tuvo lugar en Túnez. Hasta allí se trasladaron los mejores deportistas del mundo y, entre ellos, representando a la Euskal Selekzioa, estuvieron los baztandarras Aimar Rekarte, Nerea Sanz y Miguel Núñez y el beratarra Markel Sánchez.

Estos jóvenes pudieron viajar hasta Túnez y debutar en la competición mundial. Además de una “muy buena experiencia”, también se han traído una medalla a casa. El erratzuarra Aimar Rekarte logró la plata en combate de menores de 18 años, en la categoría 14-15. Nerea Sanz, de Ziga, se trajo la medalla de plata en combate de mayores de 18 años. El elizondarra Miguel Núñez, bronce en combate de semi-contacto de más de 18 años y Markel Sánchez plata en combate de 12-13 años. Aun así, no fueron los únicos premiados de la escuela de Kenpo-Kai de Elizondo. Nahia Alzuyet se hizo con la plata en combate y bronce en kata, Aiora Alzuyet con la plata en combate entre 12 y 18 años e Iñaki Alzuyet, bronce en combate de veteranos de más de 45 años. Así, cuatro medallas viajaron de Túnez a Urdazubi.

Todos ellos se mostraban muy contentos. Algunos, como Núñez, no se lo esperaban. “Ya sabíamos qué nivel tenían los de aquí, pero no teníamos ni idea de cómo iban a competir los japoneses y los de otros países” recalcaba. Sanz, por su parte, cree que “cada uno llevaba sus expectativas”. Pero más allá de los excelentes resultados, han podido disfrutar de esta experiencia única. “Ha sido muy bonito y muy diferente”, explicaba Sanz. “Al final, no es como aquí que conoces a todo el mundo. Vas allí y hay gente de todo el mundo, de Japón, Túnez…” añadía.

“Ya sabíamos qué nivel tenían los de aquí, pero no teníamos ni idea de cómo iban a competir los japoneses y los de otros países”

Miguel Núñez - Deportista de Kenpo-Kai

Al llegar al campeonato mundial, no sabían contra quienes iban a tener que competir. “De todas formas, a pesar de leer los nombres de los contrincantes, tampoco sabías con qué te ibas a encontrar” aclaraban, demostrando así que están preparados para enfrentarse a todo.

El Kenpo-Kai es un arte marcial tradicional japonés. Puede que para algunas personas resulte algo totalmente desconocido, pero en la zona de Baztan-Bidasoa lleva ya varios años practicándose con muy buen nivel, como evidencian los resultados. Aun así, incluso estos jóvenes deportistas bromean diciendo que “al principio es normal no saber lo que es el Kenpo-Kai”. Sanz y Núñez no tienen complejos a la hora de admitir que, las primeras veces, “vienes a probar sin saber muy bien qué es”. “Ves un poco de qué se trata, el buen rollo que hay…” y al final se acaban por enganchar. 

A pesar de su juventud, tienen ya un gran recorrido en este deporte. Sanz lleva ya 8 años practicando Kenpo-Kai, y ya han pasado 6 desde que, atraído por un amigo, Núñez decidió probarlo. En el caso de los más jóvenes, Rekarte, que comenzó con 6 años, lleva ya 9 y Sánchez, que se animó con tan solo 4 años a probar, lleva ya 8. Está claro que este arte marcial tiene algo que engancha. Y es que son muchos los que se juntan los sábados por la mañana para entrenar en Elizondo. De hecho, cada vez son más.

Deportistas de la escuela de Kenpo-Kai de Elizondo posan tras un entrenamiento y con las medallas obtenidas en el Mundial Ondikol

Personas de todas las edades se unen para la práctica de este arte marcial. “Gente de todas las edades entrenamos juntas” cuentan, “formamos un equipo”. Además, y tras muchos viajes y competiciones, se han dado cuenta de que tienen “una muy buena relación. Al final, somos una comunidad, una familia” concluyen. Pero no sólo entre quienes entrenan en Elizondo, sino que, como cuentan, se juntan “todos con todos, también con otras selecciones”. Afirman que existe muy buen ambiente dentro de este deporte, aunque, eso sí, tienen claro que cuando entran en el tatami a competir, ahí ya, como cuenta Sanz entre risas, “no hay perdón”. 

Este arte marcial basado en la defensa personal se orienta a todas las edades y condiciones físicas, adaptándose a cada persona. Más allá de la competición, también reúne técnicas de respiración o de masaje, con el objetivo de buscar el máximo desarrollo de todas las capacidades del practicante. En Elizondo, presumen de tener a unos maestros que son unos referentes a nivel mundial en este deporte: Juan Mari Vidal y Pilar Martínez. Resulta evidente que, siguiendo sus pasos, la juventud de esta zona de Navarra parece tener un gran futuro. Y es que, como bien dice Mikel Vaquero, miembro también de esta escuela, en Elizondo no tienen “nada que envidiar a los japoneses”.