La indignación por la relación que la presidenta Chivite y el Ministro de Agricultura hicieron ayer entre las protestas de los agricultores en Navarra y VOX ha planeado durante toda la jornada entre los que hoy de nuevo han tomado las principales vías de comunicación de la Ribera (A-68, N-121 y N-113) para mostrar su desesperación por la situación en que se encuentran, desbordados por la burocracia, con sensación de que no tienen futuro y con las dificultades que algunos señalan para encontrar gente a la que contratar para la recolección. Si bien en las protestas de esta mañana han faltado algunos, "estamos todos unidos, había gente que no podía dejar el campo, son productos perecederos. Venir aquí nos cuesta dinero. Unos días podrán unos y otros días otros, Vamos todos a una", dice Ramón Mateo.

No podemos aguantar más. Nos jode estar aquí haciendo esto, interrumpiendo el tráfico y molestando a la gente, pero no tenemos más remedio. Los políticos de este país, todos, y los sindicatos, nos han dejado tirados y nos han hecho tomar una decisión que no queríamos”, dice con rabia un emocionado Jesús Ángel Serrano, de Buñuel de pie en mitad de la A-68 a la altura de Ribaforada. “Así no podemos seguir con tanta burocracia. No puede ser que nos cambien las reglas de juego cada año, no pueden tirar de reglamentos antiguos para seguir sancionando”, apunta. Desde los 15 años, y ya ronda los 60, “poquito a poquito nos están arruinando. Tenemos que perder mas tiempo en los despachos y con la burocracia que en el campo”. Serrano lleva viviendo del campo y las lágrimas le afloran cuando habla de su familia, “Es el peor momento de mi vida. Están jugando con el pan de mis hijos. Les estoy incentivando para que no sigan en el campo porque los políticos de este país nos llevan a la ruina. Son los asesinos de la agricultura y la ganadería”, concluye.

Los agricultores reunidos por la mañana antes de cortar la A-68 a la altura de Ribaforada Fermín Pérez Nievas

También, entre el medio centenar de agricultores que a las 9.30 han cortado la A-68 había juntos padres e hijos que ven con preocupación el futuro dentro de un conglomerado de reclamaciones en el que cada uno a quien se pregunta pone el acento en un aspecto diferente. Es el caso de Alejandro Zardoya y su padre, José Luis Zardoya, de Ribaforada, que desde ayer participan en las movilizacion. “Son un cúmulo de cosas, no una ni dos. El tema de Europa con las medidas, el tema de terceros países, la contratación...”, dice José Luis. Su hijo, Alejandro toma la palabra, “en nuestro caso el problema principal es el de la contratación, es imposible recolectar a día de hoy. No conseguimos gente a ningún precio, incluso en las empresas de trabajo temporal te dicen que nadie quiere trabajar y hay mucha gente cobrando ayudas”, asegura. En estos momentos se encuentran recolectando brócoli y coliflor, con la pega de que no abastecen más a los supermercados porque no lo pueden recoger, “hay muchas empresas agrícolas que no están cultivando lo que podrían comercializar porque no tenemos la capacidad ni de sacar el cultivo adelante ni de recolectarlo. La gente cultiva solo lo que puede recoger; estamos con el freno echado porque a nivel comercial tenemos más capacidad que de producción. Es un problema severo que el gobierno no es consciente y para nosotros es algo fundamental”.

A sus 38 años lleva ya 10 años en el sector agrícola y critica la política que se hace desde los despachos de Bruselas, a su juicio, sin conocer la realidad, “nos exigen desde Europa a tener unas plantaciones que no tienen sentido, con unas rotaciones y unas cosas que no sé quién lo organiza”. Como ayer señalaban muchos se sienten abandonados y, en cierta manera, acusados por su actividad, según siente Alejandro “estoy orgulloso de ser agricultor, pero se transmite a la sociedad que al ser contratadores somos los malos de la película. Quien contrata a gente es el malo, no sé por qué, y además que no cuidamos el medioambiente. El agricultor está mal visto y somos un punto clave de la cadena alimenticia”.

A día de hoy, la empresa de Alejandro Zardoya necesita cuatro asesores, uno fiscal, otro para la trazabilidad del producto, otro laboral y otro para la prevención de riesgos, “es alucinante. El absentismo laboral en mi explotación es de un 30% diario. Todos los días me mandan mensajes, los que lo hacen, diciéndome que no vienen a trabajar, lo que me obliga a tener 7 u 8 personas más por si no vienen. Pero les da igual porque al final de mes cobran cierta cantidad de dinero fija, vengan o no”.

Alejandro Zardoya durante el corte de la A-68 Fermín Pérez Nievas

La intención de este miércoles es seguir con los cortes de las vías cada cierto tiempo, algo que están dialogando y pactando con la Guardia Civil, pese a la amenaza de las delegación de gobierno. Hoy entrarán en escena también los sindicatos agrarios, que hasta ahora se habían mantenido al margen lo que había enfadado a muchos. Ramón Mateo, uno de los que crearon las movilizaciones desde el principio señala que “la ayuda de los sindicatos la valoramos de forma muy positiva. Necesitamos a alguien que entienda de todo esto y pueda negociar con el gobierno. Nosotros sabemos de campo y necesitamos gente preparada para la hora de ir a negociar”.

Las declaraciones les han hecho dar un paso más en las reclamaciones y el objetivo claro hoy es subir la protesta de todos a Pamplona, “cuando llegamos a casa nos dimos cuenta, nos llegaron vídeos de la presidenta y el ministro que nos mezclaban con la extrema derecha y con VOX. Cada uno es de lo que sea, somos agricultores y lo que reivindicamos es porque lo necesitamos, no porque nos lo haya dicho nadie”, señaló Mateo.