Las obras del centro de tratamiento de residuos de Imárcoain, que sustituirá al vertedero de Góngora, arrancarán la primera semana de septiembre. “Por fin solucionamos el tema de los residuos que enterramos en Góngora sin tratar”, lamentó Campión. Las obras durarán dos años y la inversión asciende a los 60 millones de euros. 

Cada año, la MCP entierra en Góngora 90.000 toneladas de residuos sin tratar. El Gobierno de Navarra cobra a la MCP un canon medioambiental de 20 euros por cada tonelada vertida. Es decir, la MCP abona 1,8 millones de euros anuales. Además, la normativa europea, nacional y foral prohibe el entierro a partir de 2030.