Casi 200 colegios escogen la semana que viene y la posterior qué clase de jornada lectiva van a querer para los próximos años. A pesar de que más del 80% de colegios públicos de Navarra ya se encuentran en jornada continua porque así lo decidieron las familias y sus respectivos consejos escolares con más del 60% de votos favorables con respecto al censo, Educación del Gobierno de Navarra vuelve a obligarles a pasar por el trámite y vuelve a obligarles a partir de jornada partida, exigiendo un 60% del censo a quien quiera pasar a continua y solo un 40% a quien quiera mantenerse en partida, un mantenerse que no es tal puesto que como ya he indicado el 84% de los colegios públicos están en jornada continua. No entraré a valorar si es mejor para el alumnado tener jornada partida –que te obliga a estar en el colegio de 9 a 4 y media y al 90 o más % a hacer uso del comedor escolar– o tener jornada continua, que hace que los niños y niñas pueden acabar su jornada a las 14, las 15, las 15.30 o las 16.15-30. Sí que diré que, en mi caso concreto, tras siete años de experiencia con la continua, me parece impagable poder comer todos los días con mi hijo en casa y que esa misma opción la tengan quienes en el futuro, por el motivo que sea, vayan a poder encajar sus horarios laborales con esa opción, si es que logran ganar las votaciones que ha impuesto Educación. Al final, la vida es el colegio, pero la vida también es poder compaginarlo entre semana con tu vida familiar y de amistades, juegos, horas de sol, de parque y quien quiera y pueda de extraescolares o de actividades. En todo caso, ambas jornadas seguro que cuentan con ventajas y desventajas, pero, tras las trabas que Educación ha puesto a una de las jornadas en beneficio de otra –apuesta claramente por la partida, no se sabe por qué–, esperemos que no sirva para crear malos rollos en los colegios, salga lo que salga.
