Uno de los protagonistas del encuentro, Sergio Herrera, se marchaba ‘dolido’ de Mendizorroza al pedir el cambio por problemas físicos que le impidieron continuar en el terreno de juego. “Nos ha pasado a unos cuantos, la verdad. No sé si es por el tema de la hora, una alimentación rara cuando se juega a las 4. Me he empezado a encontrar mal, en el vestuario antes de salir me han entrado ganas de vomitar y me ha dicho el doctor que me estaba dando una pequeña insolación y después en la primera parte me he echado al suelo a ver si podía beber agua y bajar pulsaciones. He podido terminar la primera parte y bueno, al final, por otra cosa, que ha sido una sensación extraña, he tenido que pedir el cambio”.

Aun así, Herrera se mostraba “contento de poder ayudar al equipo, era una victoria muy importante contra un equipo de nuestra liga y ganar en su casa nos da unos buenos tres puntos a nosotros” y para él, “canterano, he estado siete años aquí muy a gusto, no he podido continuar, me ha dolido a mí pedir el cambio. No me dieron aquí la oportunidad de jugar en Mendizorroza y es una espinita clavada que tengo, pero he podido llegar a Primera y disfrutar de este campo”.

En lo deportivo, los puntos, a su juicio, eran “necesarios, porque no hemos podido encontrar los puntos en partidos anteriores. Cuando no juegas bien, lo más importante es ganar. No hemos hecho un buen partido, pero hemos conseguido un buen resultado. Contra el Atlético de Madrid no merecimos perder para nada y hoy, dentro de un mal partido, creo que hemos sabido competir. En mi caso, me ha tocado participar cuando me ha necesitado el equipo. Es un rival con el que estamos jugándonos la permanencia y la salvación pasa por ganar este tipo de partidos”. 

Incidiendo en su sustitución, Herrera volvió a recalcar que haber tenido que marcharse al banquillo le “fastidia, porque aparte de haber hecho un buen partido, he tenido que meter en un marrón a Aitor. Me da rabia, porque como estaba el partido, con 0-1, estando ellos mejor... le he dicho que lo siento, que no podía más”, y finalizó su comparecencia reconociendo que “tenemos que empezar a sumar de tres en tres en casa y hacernos fuertes ahí, porque fuera de casa estamos compitiendo bien y teniendo buenas sensaciones”.