El único problema de las rachas es que tarde o temprano se acaban, y Osasuna lo sabe bien porque el otro día le dio un subidón tras ganar en Anoeta, pero, mientras duran, no hay trayecto más seguro, disfrutón y feliz. El sábado visita El Sadar el Cádiz, equipo ante el que nunca ha perdido Jagoba Arrasate en su etapa en Osasuna y, es más, al que siempre ha ganado en el estadio pamplonés. No cabe duda de que el técnico rojillo quiere que se repita la historia, sin más adornos.
Osasuna le ganó al Cadiz con Arrasate en el banquillo en su primera temporada, en Segunda (2-1), y ha mantenido el paso en las tres campañas seguidas que los dos equipos se han visto en Primera (3-2, 2-0 y 2-0). El balance de goles a favor y en contra es además claramente favorable a los rojillos, con nueve dianas en su haber por solo recibidas.
El cómputo total de enfrentamientos de Osasuna con Arrasate habla que en los nueve partidos que ha habido, en siete oportunidades ha habido victoria de los rojillos por tan solo dos empates como peor marcador –igualadas en Cádiz en la campaña 2018-19 en Segunda (0-0) y este curso en la primera vuelta (1-1)–.
Abriendo todavía un poco más el foco de los cruces de caminos entre Arrasate y el Cádiz, en total son trece partidos en los que se ha medido el técnico de Osasuna con los andaluces, y que se suman los cuatro encuentros en su etapa en el Numancia, en Segunda División. En casa, perdió en la campaña 2016-17 (0-3) y a la siguiente ganó en Los Pajaritos (1-0) –perdió también en Cádiz en la primera campaña y empató en la segunda–.
En el caso de Osasuna ha habido estabilidad en el banquillo con la presencia del técnico durante las seis últimas temporadas, y en el conjunto gaditano se ha intentado lo mismo, hasta el último terremoto. En su primer enfrentamiento, en Segunda, Álvaro Cervera era el técnico de los amarillos, que se mantuvo hasta que hace dos cursos llegó Sergio mediado el campeonato. El técnico se ha mantenido hasta que hace unas jornadas llegó Pellegrino. Arrasate busca otra víctima en esta racha.