La nueva alcaldesa de Pamplona, Cristina Ibarrola, inició este lunes la primera semana de su mandato con la celebración de una Junta de Gobierno Local y la tarea pendiente de reorganizar las áreas municipales con la designación de los futuros concejales delegados en cada una de ellas.
Fuentes oficiales aseguraron a este medio de comunicación que la mañana fue frenética de reuniones y que ya se firmaron las primeras resoluciones que van a permitir a la nueva regidora poner en marcha su equipo de Gobierno.
La Junta de Gobierno Local provisional está presidida por Cristina Ibarrola y de ella formarán parte Carlos Salvador, como concejal secretario, María Caballero, María Echávarri y Javier Labairu.
Respecto a las concejalías delegadas, la alcaldesa estableció mediante decreto un reparto provisional de las áreas. Así, Carlos Salvador será el concejal delegado de Gobierno Estratégico, Comercio y Turismo, y de Cultura. Por su parte, María Caballero asume la concejalía delegada de Servicios Sociales, Acción Comunitaria y Deporte, así como de Igualdad.
María Echávarri se hará cargo de la concejalía de Servicios Generales, y de Urbanismo, Vivienda y Sanidad, además de Proyectos Estratégicos, Movilidad y Sostenibilidad. Javier Labairu mantiene el área de Seguridad Ciudadana y añade la concejalía de Educación, Participación Ciudadana y Juventud.
También aprobó los nombramientos de las tenencias de Alcaldía, puestos que ocuparán Carlos Salvador Armendáriz, como primera tenencia; María Caballero Martínez, en la segunda tenencia, y María Echávarri Miñano, como tercera tenencia.
Ibarrola cuenta con la ventaja de que el cambio en el gobierno municipal será tranquilo y que la transición con el alcalde saliente y compañero de partido Enrique Maya no tendrá sobresaltos.
La alcaldesa volvió a insistir este lunes en la seguridad ciudadana como prioridad de su acción de gobierno, así como en implementar medidas que faciliten las gestiones que los ciudadanos realizan con el Ayuntamiento.
Conocida su intención de gobernar en solitario, la nueva estructura municipal tendrá que adaptarse a la representación de UPN, 9 concejales en total, lejos de los 14 que otorgan la mayoría absoluta ni con el respaldo de los 2 ediles del PP que apoyaron a Ibarrola en su investidura.
Las previsiones que manejan los regionalistas es aprovechar esta primera semana para diseñar la nueva organización interna, que en todo caso tendrá que estar fijada antes del inicio de las fiestas de San Fermín, y concretar los cargos de designación.
Además, deberá fijarse el calendario de las Comisiones municipales (Presidencia, Asuntos Ciudadanos y Urbanismo), composición, horarios y formato de la sesiones.
A partir de la semana que viene se convocará la primera reunión de la Junta de Portavoces, que pasa de 4 a 6 integrantes, tras conseguir representación PP y Contigo-Zurekin; y antes de las fiestas se celebrará el primer Pleno de la legislatura.
Las formaciones que han obtenido representación han iniciado este lunes los trámites para constituirse como grupos municipales e inscribir a sus asistentes.
El espacio que ocuparán los dos concejales populares, Carlos García Adanero y Carmen Alba, y el de Contigo-Zurekin, Txema Mauleón, está sin resolver. Dado que el espacio asignado a los grupos municipales está ocupado por 4 formaciones, será necesario reorganizar los despachos para dar cabida a las nuevas formaciones.
