El cambio en la meteorología dará por fin este miércoles un alivio en la lucha contra la oleada de incendios que se vienen sucediendo en la Comunidad Foral desde el pasado sábado. En la Zona Media, uno de los lugares más afectados por los incendios de Olleta y Ujué, se esperaban fuertes tormentas esta madrugada. Así lo anunció ayer el delegado territorial de la Agencia Estatal de Meteorología en Navarra (Aemet), Peio Oria, quien reconoció que la previsión había cambiado a lo largo de este martes. 

“El movimiento de la DANA sobre Galicia nos determina un riesgo alto de fuertes tormentas en la zona centro y norte de Navarra esta madrugada del martes al miércoles a partir de las doce. A diferencia de la semana pasada, estas tormentas no serán secas y pueden dar lugar a mucha precipitación o granizo. Lo que no sabemos es si caerá sobre los focos más preocupantes del incendio, como el de la zona de Ujué, Lerga o Gallipienzo porque es muy difícil precisar en un rango kilométrico tan concreto”, explicó. 

La probabilidad de nuevas precipitaciones importantes se reduce durante la jornada del miércoles y el jueves, pero lo que está claro es que van a mejorar notablemente las condiciones meteorológicas para la extinción de los incendios. “Vamos a notar desde hoy un descenso acusado de varios grados, la humedad relativa se recupera algo, y parece que la tónica de estos últimos días se va a romper un poco a partir de mañana”, remarcó.

Sobre la jornada de este martes, Peio Oria destacó la presencia de un importante viento sur. “Desde la tarde de ayer arreció el viento en toda la zona Media de Navarra y volvió a ser viento sur, seco, con bajas humedades relativas, temperaturas superiores a 30 grados. Aunque no haya sido como lo del sábado, sí que hubo en la Zona Media, la más crítica ahora mismo, rachas fuertes o muy fuertes de viento hasta finales de la tarde”, remarcó.

Unos incendios sin precedentes

Además, Peio Oria destacó que los incendios declarados este fin de semana en Navarra no han tenido “precedentes en cuanto a su magnitud”, pero tampoco en cuanto a condiciones meteorológicas, ya que el sábado 18 se batieron muchos récords. “Pamplona vivió su noche más cálida desde que existen registros en los años 50. Hubo una mínima de 26,4 grados, una cifra complemente disparatada y lo que se conoce como noche ecuatorial. Fue así por el fuerte viento sur que tuvimos, muy seco, con un día anterior con temperaturas cercanas a 40 grados, que en buena medida contribuyeron a propagar esos terribles incendios forestales. Además, hubo tormentas secas que en algunos casos llegaron a ser las causantes de los fuegos”, recordó.

También se refirió a la ola de calor registrada en Navarra durante los días previos a los incendios. “Ha sido completamente histórica, no solo en Navarra, sino también en la Península y en el conjunto europeo, con temperaturas que han superado 40 grados”. Según Oria, nunca se habían registrado temperaturas “tan altas para mediados de junio en Navarra”. “Ha sido una ola de calor totalmente extraordinaria, prematura, anticipada y con registros sin precedentes en las últimas décadas”, remarcó.

Por último, Peio Oria resaltó la buena predicción de la Aemet durante estos últimos días. “Teníamos un aviso rojo por altas temperaturas en la Ribera y en la Zona Media había un aviso naranja que estuvimos incluso valorando si subirlo a rojo. En la vertiente cantábrica sí que reconozco que igual nos quedamos un poco cortos porque también se dieron temperaturas de récord como los 42 grados en Irurita o los 44 de Hondarribia. Pero bueno, creo que desde el punto de vista meteorológico la previsión sí que era bastante precisa”, concluyó.