El presidente del Parlamento de Navarra, Unai Hualde, el consejero de Educación del Gobierno foral, Carlos Gimeno y la directora general adjunta de Aldeas Infantiles SOS, María del Mar Líndez, han asistido este martes el salón de plenos del Parlamento de Navarra a una sesión en la que diputados infantiles, escolares de Marcilla y Pamplona, han debatido y acordado propuestas destinadas a fomentar el valor de la responsabilidad con la Agenda 2030 y de reflexionar para la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas. Este año los objetivos a alcanzar han sido: la reducción de las desigualdades en y entre los países (ODS 10) y la construcción de ciudades y comunidades sostenibles (ODS 11).
La dinámica 'Diputados/as por un día' se enmarca en el programa educativo 'Abraza tus valores', en el que trabajan 3.000 alumnos navarros de Infantil y Primaria de 30 centros escolares de la Comunidad foral.
En la sesión de este martes han participado 68 escolares de Primaria de los colegios San Bartolomé, de Marcilla, y San Juan de la Cadena, de Pamplona, y han tomado asiento en los lugares habitualmente destinados a los representantes navarros.
La sesión ha sido conducida por la jefa de prensa de Aldeas Infantiles SOS, Gracia Escudero, y ha contado, además, con la asistencia de los parlamentarios Ángel Ansa (UPN), Arantza Biurrun (PSN), Eneka Maiz (EH Bildu), Isabel Aranburu (Geroa Bai), Maribel García Malo (PPN) y Miguel Garrido (Contigo-Zurekin).
En su discurso de bienvenida, el presidente del Parlamento, Unai Hualde, ha puesto en valor la celebración de este "tradicional" acto que permite al alumnado conocer el Parlamento y también "acercarnos a una cuestión tan importante como es la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidades", objetivos con los que el Parlamento de Navarra tiene un "claro compromiso".
Así, tras agradecer la labor desarrollada por Aldeas Infantiles y la implicación del profesorado, Hualde ha abogado por seguir trabajando para "acabar con la pobreza, reducir las desigualdades y conseguir la paz y la justicia".
Carlos Gimeno, consejero de Educación del Gobierno de Navarra, ha felicitado a Aldeas Infantiles y ha puesto el foco en la educación, apuntando que se trata del "factor de progreso individual y colectivo más importante". "El valor de la democracia reside en la diversidad y la pluralidad, y la educación de calidad y equitativa tiene como objetivo incluir a todas las personas y no dejar a nadie atrás. Ese es el objetivo de la educación y de todos los grupos políticos, reducir las desigualdades", ha dicho.
A continuación, ha tomado la palabra la directora general adjunta de Aldeas Infantiles SOS, María del Mar Líndez, quien ha agradecido los "más de 26 años que llevamos colaborando en este proyecto que pretende proponer a los alumnos que reflexionen entorno a unos valores que sirven para vivir el ahora y forjar el futuro". En este sentido, ha recomendado a los escolares presentes que entrenen los valores en pequeños gestos a su alcance porque "es imposible construir un mundo mejor sin una sociedad más educada, más igualitaria y más sostenible".
En representación del colegio San Bartolomé han ejercido como portavoces Sofía Jiménez e Iker Navarro, y en nombre del colegio San Juan de la Cadena han participado Lucía Ibáñez y Aitor Lorea. Los cuatro portavoces han presentado 12 compromisos y se ha abierto el turno de votaciones. Todos los parlamentarios infantiles han pasado uno a uno por la urna para hacer su elección.
Aldeas Infantiles SOS es una organización internacional, privada, de ayuda a la infancia, sin ánimo de lucro, interconfesional e independiente de toda orientación política, fundada en 1949 en Austria y con presencia en 138 países. Su labor se centra en el desarrollo de los niños hasta que llegan a ser personas autosuficientes y bien integradas en la sociedad.
Trabaja para fortalecer a las familias vulnerables, de modo que puedan atender adecuadamente a sus hijos; protege a los niños que se han visto privados del cuidado parental, a los que brinda un entorno familiar protector en el que puedan crecer sintiéndose queridos y respetados, y acompaña a los jóvenes en su proceso de maduración e independencia, ha informado el Parlamento en una nota.
