La policía alemana busca a un sospechoso, de 1,80 metros de altura y barba negra, como el presunto agresor que ayer irrumpió en un gimnasio de Duisburg y causó heridas de gravedad a cuatro hombres, de entre 25 y 35 años, tras lo cual huyó del local.

El ataque se produjo con arma blanca, tal vez un machete, según informaciones del semanario "Der Spiegel", que cita fuentes de la investigación.

Una de las víctimas era aparentemente la persona a la que buscaba de forma deliberada el agresor, mientras que los otros tres resultaron heridos tras salirle al paso.

Tres de los heridos fueron operados de urgencia por la noche mientras que el cuarto sigue en estado crítico.

El ataque se produjo ayer sobre las 17.30 hora local (15.30 GMT) y a los pocos minutos la policía recibió varias llamadas alertando del ataque en el local, que se encuentra en el centro de Duisburg, en las inmediaciones del ayuntamiento.

La policía acordonó la zona en un amplio radio y procedió a interrogar a testigos, principalmente ente los visitantes del gimnasio.

Inicialmente se pensó que eran dos los atacantes, pero posteriormente se pasó a considerar que fue un único agresor, que sigue a la fuga.

El sensacionalista diario "Bild" recuerda que en los días de la Semana Santa pasada un hombre de 35 años murió a consecuencia de un ataque a cuchilladas también en Duisburgo, sin que hasta ahora se haya aclarado la autoría del crimen.