Después de los dos incidentes consecutivos que sufrió el avión del príncipe Felipe en sus últimos viajes oficiales, ayer le tocó pasar el mismo mal trago al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que se vio obligado a regresar a Dublín por un problema mecánico en la aeronave que le traía de vuelta a España tras haber participado en la cumbre del Partido Popular Europeo. El incidente es el tercero que sufre un aparato perteneciente a la flota de la Fuerza Aérea española en cien días, después de las dos averías que se registraron en uno de los Airbus A31.
El Falcon 900 del Ejército del Aire en el que Rajoy iba a regresar a España a primera hora de la tarde sufrió una avería cuando ya había despegado y tuvo que regresar al aeropuerto. Según informó el Ministerio de Defensa, tras partir de Dublín, y cuando la aeronave se encontraba a unos 300 pies del suelo, se iluminaron en cabina las luces de aviso de fallo que indicaban que la reversa del motor número 2 no estaba blocada y segura en la posición de plegada.
La tripulación aplicó el correspondiente procedimiento de actuación para estos casos pese a que se trataba, según Defensa, de un "fallo menor". Al ver que no desaparecía el aviso, la tripulación, siguiendo los pasos establecidos en el procedimiento para esta contingencia, solicitó instrucciones al control para regresar y aterrizar.
aterrizaje normal El ministerio que dirige Pedro Morenés quiso dejar claro que, durante la incidencia, "en ningún momento" fue necesario declarar emergencia en el vuelo y que el aterrizaje resultó "normal".
Una vez en tierra, se informó de la incidencia al centro de operaciones del 45 Grupo del Ejército del Aire, la unidad que se encarga del transporte aéreo del rey y miembros del Gobierno, y se ordenó de inmediato el despegue de otro avión desde Madrid para que se hiciera cargo del vuelo de regreso del presidente.
No obstante, un portavoz de Defensa indicó de que el jefe del Ejecutivo, que partió de la capital irlandesa sobre las ocho y cuarto de la tarde, finalmente regresó a España en el Falcon en el que se detectó el fallo, una vez éste fue reparado por los técnicos del Ejército del Aire. El segundo Falcon también estaba volviendo con parte de la delegación que acompañó al presidente en este viaje.
tercer incidente similar Este incidente es el tercero que sufre una aeronave perteneciente a la flota de la Fuerza Aérea española en tres meses, después de las dos averías que se registraron en uno de los Airbus A310 en sendos viajes del Príncipe de Asturias a Brasil y a Honduras en noviembre y enero, respectivamente. Tras conocer lo sucedido, el primer ministro de Irlanda, Enda Kenny, se puso en contacto telefónico con el presidente Rajoy para interesarse por el fallo técnico sufrido por el avión.
Sin viaje. El primer incidente tuvo lugar el 25 de noviembre, cuando se detectó una avería en el sensor que provocaba un cortocircuito en uno de los flaps del ala izquierda del avión. Felipe y la delegación de empresarios y periodistas que le acompañaban se quedaron en tierra ante las dificultades para su arreglo.
El filtro del aceite. El 26 de enero, el Airbus que llevaba al príncipe a Honduras realizó una escala técnica en República Dominicana y, tras partir de nuevo, tuvo que regresar por una avería en uno de los indicadores del filtro de aceite.