Jartum - Los militares de Sudán incomunicaron Jartum, bloqueando las principales avenidas y los puentes que la conectan con las ciudades vecinas, después de desmantelar ayer por la fuerza la acampada opositora, causando al menos 3o muertos. Las autoridades también cortaron el servicio de Internet de las tres empresas de telecomunicaciones del país y la emisión de las 30 cadenas de radio públicas y privadas de la capital sudanesa. La acampada opositora está vacía y es imposible llegar a ella, porque las fuerzas de la Policía, del Ejército y del Apoyo Rápido -la fuerza especial de las Fuerzas Armadas- cerraron todas las calles que llevan al lugar.

El Comité Central de Médicos, un sindicato opositor, afirmó que en el desmantelamiento de la acampada, ubicada en una explanada frente al cuartel general de las Fuerzas Armadas, murieron al menos trece personas y 116 resultaron heridas.

El médico Abdelsalam al Ruba, que trabaja en la morgue de la ciudad de Um Durman, dijo que cuatro cuerpos llegaron ayer al depósito de cadáveres con orificios de bala. Según la fuente, los cuatro fallecidos fueron tiroteados mientras participaban en manifestaciones en Um Durman, ciudad separada de Jartum por el río Nilo.

La mayoría de las calles de Jartum permanecían vacías y las tiendas y mercados cerraron sus puertas después de los incidentes en la acampada opositora.

Los barrios de la capital sudanesa estaban incomunicados porque los militares habían colocado barricadas hechas de neumáticos y troncos de árboles. La Asociación de los Profesionales, que lidera el movimiento de protesta, aseguró que “un gran número” de milicianos “a sueldo” atacaron con munición real a los manifestantes.

La junta militar negó haber atacado a los participantes en la protesta y aseguró que el Ejército intervino después de que un grupo de “infractores” se infiltrara en la acampada generando una situación de caos.

La acampada estaba instalada frente al cuartel general del Ejército desde el 6 de abril, cinco días antes del derrocamiento del presidente Omar al Bashir, y se mantenía para presionar a los militares a que entreguen el poder a los civiles.

Las Fuerzas de la Libertad y el Cambio, la plataforma que aglutina a la oposición, reaccionó al desalojo violento con la suspensión de las conversaciones con la junta militar.

El presidente de la Comisión de la Unión Africana (UA), Moussa Faki Mahamat, condenó la violencia que se desencadenó ayer en Sudán durante el desalojo de los manifestantes y pidió a la junta militar que gobierna el país que proteja a los civiles. “El presidente pide al Consejo Militar de Transición que proteja a los civiles de más daños”, declaró la UA en un comunicado. - Efe