londres - El ministro de Asuntos Exteriores británico, Jeremy Hunt, advirtió ayer a Irán de que “puede haber elegido un camino peligroso” con su captura de un petrolero británico cuando navegaba en el estrecho de Ormuz. “La acción en el golfo muestra preocupantes señales que indican que Irán puede haber elegido un camino peligroso con un comportamiento ilegal y desestabilizador tras la detención legal en Gibraltar de un cargamento de petróleo para Siria”, expuso. Asimismo, el Gobierno británico pidió a sus navíos que permanezcan fuera del estrecho por un “periodo provisional”.

Por su parte, los Guardianes de la Revolución de Irán informaron de que un buque de guerra británico intentó impedir el viernes la captura del Stena Impero en el estrecho de Ormuz por guardias iraníes. Además, Ramezan Sharif, portavoz del cuerpo militar de élite -que publicó un vídeo de la detención-, dijo que, a pesar de “la intervención” del buque de guerra, los comandos navales iraníes pudieron llevar el petrolero a la costa. Las autoridades iraníes abrieron una investigación al petrolero por no respetar las normas de navegación. - Efe