- El ministro de Sanidad, Salvador Illa, señaló ayer que su Ministerio continúa estudiando si hace obligatorio el uso de mascarillas en todos los espacios públicos para prevenir los contagios de coronavirus, tal y como abordó ayer con las comunidades autónomas en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS).

En rueda de prensa para anunciar qué territorios pasan de fase en la desescalada, el ministro detalló que "efectivamente" las autoridades del Ministerio de Sanidad han valorado la obligatoriedad de las mascarillas en todos los espacios, pero que no han llegado a una conclusión, por lo que esta decisión sigue siendo estudiada.

"Estamos estudiando si procede tomar alguna medida adicional a este respecto. En cuanto decidamos tomarla, si es que la tomamos, la daremos a conocer. Estamos en permanente revisión de estas medidas, intentando adaptarnos de la mejor forma posible a cómo evoluciona la epidemia", comentó Illa.

El ministro recordó que las mascarillas ya son obligatorias al utilizar el transporte público, y son "altamente recomendables siempre que no se pueden guardar los dos metros de distancia de seguridad" recomendados para reducir el riesgo de contagio.

El Ministerio ya trasladó el pasado lunes a las CCAA en el CISNS la posibilidad de incrementar el uso de las mascarillas hasta hacerlas obligatorias, en una reunión en la que hubo "opiniones en distintos sentidos".

"Hay argumentos en pro y en contra. Nunca nos hemos negado a revisar nuestras medidas conforme evolucionen las etapas y haya nueva evidencia. Ahora estamos en fase de evaluar si procede o no su uso obligatorio en determinadas situaciones", comentó el ministro Illa durante su comparecencia este jueves en la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados.

Por su parte, el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Fernando Simón, recordó que el uso de las mascarillas FFP2, como las que ha distribuido la Comunidad de Madrid a todos sus ciudadanos a través de las farmacias, no están recomendadas para la población general, pero ha puntualizado que su utilización no le parece "ni mal ni bien".

El experto señaló que las mascarillas protegen "en ambas direcciones", es decir, tanto al portador como a la persona que pueda tener un contacto cercano, pero indicó que algunas tienen un mayor índice de protección. Tal y como expuso, las FFP2 solo están recomendadas para profesionales en contacto con el virus y colectivos vulnerables bajo prescripción médica.

"No están recomendadas para la población general, pero no me parece ni mal ni bien", apuntó el epidemiólogo. Simón esgrimió que "sería importante que la lleven las personas vulnerables, pero que, si no, la quirúrgica protege no exactamente igual pero no está lejos de la FFP2".

"Por lo tanto, las quirúrgicas, que son mucho más asequibles, son las más útiles en la gestión de contagios poblacionales. No nos interesa proteger a cada individuo sino que ese individuo no contagie a otro", detalló.

Por su parte, el Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra (ISPLN) ha recordado la recomendación de usar mascarilla siempre que no pueda mantenerse la distancia física de seguridad de dos metros entre personas. Además, su empleo continúa siendo obligatorio en el transporte público.

Este organismo destaca la importancia de "realizar un uso adecuado de la mascarilla entre la población en general", una medida de prevención que, además, está en permanente revisión para adecuarse a la evolución de la pandemia del COVID-19.

La mascarilla debe utilizarse en los establecimientos y servicios cuando no puede garantizarse esa distancia de seguridad entre el personal o con la clientela. Sobre este tema, y los consejos básicos para ponerse una mascarilla de forma adecuada y desprenderse de ella, el ISPLN ha elaborado una infografía que puede consultarse en la página web del Instituto.

Siguiendo las indicaciones establecidas por los ministerios de Sanidad y de Consumo, actualizadas esta semana, se recomienda a la población general sana el uso, preferentemente, de mascarillas higiénicas. Para personas enfermas de COVID-19, con síntomas o en cuarentena, se aconseja el uso de mascarillas quirúrgicas, así como para quienes cuiden de personas que tienen especial vulnerabilidad, ha informado en un comunicado el Gobierno de Navarra.

En algunas circunstancias y enfermedades pueden indicarse otros tipos de mascarillas. También en el trabajo los equipos de protección respiratoria deben adecuarse al riesgo de exposición al coronavirus o al tipo y nivel de riesgo químico en el puesto de trabajo. En estos casos, se debe consultar al servicio de prevención de riesgos laborales respectivo o bien al Servicio de Salud Laboral del propio ISPLN sobre el equipo de protección individual (EPI) más adecuado.

"Un empleo adecuado de la mascarilla en la comunidad puede ayudar a reducir la propagación de la infección, al minimizar la excreción de gotas respiratorias de individuos que pueden no saber que están infectados", ha destacado el Ejecutivo foral, que ha incidido en la necesidad, igualmente, de "no abandonar el resto de medidas preventivas" durante la fase de desescalada.

DETECCIÓN DE SÍNTOMAS, DISTANCIA Y LAVADO DE MANOS

La mascarilla es siempre complementaria a otras medidas de prevención fundamentales. En primer lugar, llamar al centro de salud ante los primeros síntomas (fiebre, síntomas respiratorios, etc) y no salir del domicilio tanto en ese caso como si se está en aislamiento o en cuarentena por ser contacto estrecho (menos de 2 metros y más de 15 minutos) de una persona enferma.

Para quienes salgan a la calle, es clave mantener la distancia de 2 metros entre personas no convivientes y realizar un lavado de manos frecuente (con agua, jabón o geles hidroalcohólicos). En el uso de mascarilla también es importante "evitar la falsa sensación de seguridad que puede llevar a relajarse sobre mantener la distancia de seguridad" o el lavado de manos.

La mascarilla, como ya estableció el Gobierno central a partir del 4 de mayo, tiene que utilizarse de forma obligatoria en el transporte público (autobús, ferrocarril, taxis). También es requerida en el trabajo siempre que no se pueda respetar esa distancia de seguridad de 2 metros entre trabajadores y trabajadoras y/o con la clientela.

Su uso está recomendado para la población general cuando no pueda guardarse esa distancia física de seguridad entre personas, por ejemplo al hacer la compra, al acudir a comercios u otros servicios, cuando se sale a la calle en una zona con aglomeraciones y al mantener contacto cercano inevitable con otras personas. Además, la orden del Ministerio de Sanidad publicada este 9 de mayo en el BOE establece la recomendación de usar mascarilla con carácter general en lugares de culto religioso.

CÓMO COLOCAR, LLEVAR Y RETIRAR UNA MASCARILLA

El Ejecutivo navarra ha subrayado que "un uso incorrecto de la mascarilla puede generar más riesgo". Entre los errores más frecuentes que se describen están el tocarla con las manos; bajarla al cuello o subirla a la cabeza para hablar, fumar, comer o beber; retirarla para respirar mejor o hablar por teléfono; darle la vuelta; añadirle algún producto químico para alargar su uso, utilizar como protección las gafas de buceo.

Por ello, desde Salud Pública se explica que, antes de ponérsela, hay que lavarse las manos, colocársela sin tocar la parte delantera; si tiene banda metálica, ajustarla al puente de la nariz; y cubrirse boca, nariz y barbilla de forma que quede ajustada.

Una vez puesta, es importante evitar tocar la mascarilla, lavarse las manos si molesta y se quiere recolocarla o sustituirla, no desprenderse de ella aunque se hable o se tosa, no llevarla al cuello o a la frente, no usarla durante más de 4 horas y cambiarla si se humedece o daña.

Para quitársela, la clave consiste en retirarla siempre desde atrás, cogiéndola por las cuerdas, sin tocar la parte delantera, para poder desecharla en una papelera. Si es de un solo uso, no puede reutilizarse. Si, en cambio, se trata de una mascarilla higiénica reutilizable, la indicación es lavarla a 60 grados o como indique el fabricante, y teniendo siempre en cuenta el número máximo de lavados. Y, por último, retirarla sin tocar la parte delantera y, una vez retirada, volver a lavarse las manos tras desecharla adecuadamente en un cubo cerrado, sin tirarla en ningún caso al suelo.

Siguiendo las recomendaciones establecidas por el Ministerio de Sanidad, la Comisión Europea y la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el momento actual de reanudación de la vida económica y social, el ISPLN ha pedido trasladar el esfuerzo dedicado a quedarse en casa a la adopción del conjunto de medidas preventivas necesarias hoy para seguir protegiendo la salud y la vida de las personas, más teniendo en cuenta el paso de la fase 0 a la fase 1 en toda Navarra.

"El reto colectivo continúa e implica a todas y todos. Sigue siendo necesario el compromiso de toda la sociedad, actuando con solidaridad y con cabeza", ha resaltado. "Es necesario que cada persona, en cada situación, analice el riesgo específico y decida y adopte las medidas preventivas más adecuadas. Mantener todas las medidas preventivas es la mejor opción", ha concluido.