Naciones Unidas ha inaugurado este martes su 75º período de sesiones de la Asamblea General, en un año "crucial" debido a los retos a los que se enfrenta el organismo debido, especialmente, a la pandemia de coronavirus, según ha subrayado el secretario general de la ONU, António Guterres.

En una cita en la que los diplomáticos, provistos con mascarillas, han guardado varios asientos de distancia para protegerse de la covid-19, Guterres ha puesto el foco en que la ONU responda al "impacto inmediato" de la pandemia mediante "el fortalecimiento de los sistemas de salud y el apoyo al desarrollo y la distribución equitativa de tratamientos y vacunas".

Asimismo, ha instado a prepararse para "construir" una "fuerte recuperación" que se base en la Agenda 2030 y el Acuerdo de París. A estos retos, Guterres ha sumado la paz y la seguridad, el desarme, los Derechos Humanos, la igualdad de género y el desarrollo sostenible.

También, ha destacado las expectativas que el mundo tiene puestas en la ONU al celebrarse su 75º aniversario, ya que representa la principal plataforma para el multilateralismo y la cooperación internacional.

En este sentido, ha matizado que "la fuerza del multilateralismo está cambiando" y ha señalado, como en otras ocasiones, "la necesidad de un tipo de multilateralismo más interconectado e inclusivo para el siglo XXI".

Posteriormente, Guterres ha dado la bienvenida al nuevo presidente de la Asamblea General, el diplomático turco Vokan Bozkir, que sustituye a Tijjani Muhammad-Bande, de Nigeria, en el cargo.

De Bozkir, el secretario general ha destacado que acoge "con satisfacción" su promesa de "trabajar para consolidar la confianza y la cohesión entre los Estados miembros de las Naciones Unidas, los principales grupos de países y otras organizaciones internacionales".

El diplomático, que cuenta con casi 50 años de experiencia profesional y ha trabajado como ministro de Asuntos Europeos en Turquía, ha aludido durante su discurso a que los detractores del multilateralismo han sido más críticos desde que comenzó la pandemia de covid-19.

"Se ha utilizado a la pandemia para justificar medidas unilaterales y debilitar el sistema internacional. Se ha criticado a las organizaciones internacionales y se ha cuestionado la necesidad de la cooperación internacional", ha afeado. No obstante, aunque ha admitido que estas críticas "no son infundadas", sí ha matizado que "sus conclusiones son erróneas.

En este sentido, ha recordado que ningún país puede combatir la pandemia por sí solo y que el distanciamiento social a nivel internacional no es una ayuda.

"El unilateralismo sólo fortalecerá la pandemia. Nos alejará de nuestro objetivo común. En este momento de crisis es nuestra responsabilidad fortalecer la fe de la gente en la cooperación multilateral y las instituciones internacionales, con la ONU en su centro", ha recalcado.