pamplona - El expresidente de la Generalitat Valenciana y exministro de Trabajo Eduardo Zaplana -imputado en el caso Erial, en el que se investigan supuestos amaños en las adjudicaciones de las ITV y el Plan Eólico- negar ayer que tenga “ninguna cuenta ni ningún bien fuera de España” tras publicarse que su presunto testaferro y también el de expresidente madrileño Ignacio González movió 156 millones en Andorra . Así lo aseguró en sus primeras declaraciones tras salir en libertad, tras firmar en la Ciudad de la Justicia de Valencia por segunda semana tras su puesta en libertad y después de conocerse que un informe de la UCO de la Guardia Civil cifra en 10,5 millones de eeuros el montante total de los presuntos sobornos investigados en la operación. Zaplanta también aseguró que no hizo adjudicaciones ilegales en su etapa como president de la Generalitat. “Jamás participé en ningún acto contrario a la legalidad”, zanjó. Sin embargo, las noticias conocidas ayer apuntan en sentido contrario.

El abogado Fernando Belhot, presunto testaferro del exministro movió, al menos, 156 millones de euros en la Banca Privada d’Andorra (BPA), según documentos internos de esta entidad a los que ha tenido acceso El País. Belhot, un letrado uruguayo especializado en crear telarañas societarias opacas, figuró como representante, accionista o beneficiario de al menos cuatro compañías que se usaron para abrir cuentas en la BPA entre 2006 y 2014. Por estas firmas circuló un caudal de fondos a golpe de 697 ingresos que sumó, al menos, 156 millones de euros. Un dinero que el asesor fiscal manejó en nombre de decenas de clientes, según los documentos confidenciales de la BPA.

Zaplana recurrió, supuestamente, a la madeja societaria de Belhot para canalizar parte de los 10,5 millones de euros que su red cobró presuntamente a cambio de adjudicaciones otorgadas durante la etapa del político como presidente de la Generalitat Valenciana (1995-2002). El exdirigente del PP fue arrestado el pasado mayo en la Operación Erial, que indaga, entre otros, los delitos de malversación, cohecho, prevaricación y fraude fiscal en el marco de una red que percibió comisiones ilegales.

En una conversación grabada por la Guardia Civil el pasado abril en el hotel Wellington de Madrid entre Belhot y el exministro y expresidente de la Generalitat Valenciana, Zaplana se muestra “acojonado” tras descubrir una noticia que menciona la madeja mercantil de su testaferro uruguayo. Después, reconoce la pericia del letrado en materia de ingeniería fiscal. “Tengo mucha confianza en ti? Sé que te sabes manejar”, le dice Zaplana a su pantalla fiscal.

Según la Guardia Civil, la red de Zaplana ocultó en Andorra parte del dinero que transfirió de Imison International, una sociedad utilizada supuestamente para repatriar a España comisiones de la trama abonadas por la familia del ex director general de la Policía Juan Cotino, que está investigado en el caso Erial. - D.N.