PAMPLONA. Uno de los guardias civiles absueltos en el juicio del conocido como caso espías de la Comunidad de Madrid, supuestamente ordenado por altos cargos del Partido Popular en la etapa de Esperanza Aguirre como presidenta de la formación política, ha denunciado en los tribunales a quien fue fiscal superior en la comunidad, fiscal jefe Anticorrupción y en la actualidad fiscal de Sala en el Supremo, Manuel Moix, así como al comisario de la Policía Nacional, Jaime Barrado, y a quien fue jefe de la UDEF del mismo cuerpo policial, José Luis Olivera, según informa esta mañana La Ser.

Según la cadena, el abogado del agente denunciante José Luis Caro Vinagre, José Javier Vasallo, denuncia a Moix y al resto de demandados por delitos de organización criminal, prevaricación, tráfico de influencias, cohecho, malversación y delito continuado de falsedad documental.

Los escritos, según La Ser, describen la práctica de “múltiples irregularidades” durante la instrucción del proceso, supuestamente ordenadas por Moix y Olivera, ejecutadas en colaboración con Barrado, “atendiendo a los intereses políticos del Partido Popular”.

La dirección letrada de Caro Vinagre sostiene que por orden de Moix y en colaboración con los policías, fueron acusados del espionaje quienes nada tenían que ver con él, para proteger a los altos cargos del PP que realmente lo decidieron y nombraron a los verdaderos responsables de la operación.

En este sentido, el escrito de denuncia asevera que Manuel Moix excedió los límites legales en la investigación para sostener su acusación, vulnerando el derecho a la intimidad de los acusados al obtener sus teléfonos de forma ilícita. También reprocha que les tomó declaración sin abogado.

La denuncia reclama que testifiquen por estos hechos ante el Supremo el propio Moix, así como Olivera y Barrado, entre otras pruebas testificales. También solicita que Moix abone una fianza de 250.000 euros para “reparar los daños morales, psicológicos y afectivos causados” al guardia civil José Luis Caro Vinagre, quien en la actualidad se encuentra de baja laboral por este motivo.

El letrado reclama otros 250.000 euros a los agentes Olivera y Barrado en la denuncia presentada en los juzgados de Plaza Castilla.

El guardia civil José Luis Caro Vinagre fue absuelto del caso espías, pero condenado en firme por el Supremo a un año y seis meses de cárcel por participar en el chivatazo de la Púnica, al advertir al exconsejero Francisco Granados de la existencia de una investigación sobre su amigo y supuesto conseguidor del entramado corrupto, David Marjaliza.