pamplona - El independentismo conmemoró ayer el segundo aniversario del 1-O con la vista puesta en la respuesta a la sentencia del procés. Partidos y entidades independentistas llamaron a responder a una eventual sentencia condenatoria del Tribunal Supremo en el caso del procés “de manera masiva desde la lucha no violenta y la desobediencia civil”.

JxCat, ERC, la CUP, la ANC y Òmnium Cultural presentaron en una rueda de prensa conjunta en los jardines de la Sedeta el marco de las movilizaciones que preparan si la sentencia del Supremo es condenatoria, aunque no concretaron ninguna de las acciones que preparan.

El periodista Martí Anglada, la historiadora Anna Sallés y el activista y exdiputado de la CUP David Fernàndez ejercieron de portavoces del independentismo al leer un manifiesto acordado por las organizaciones presentes, que dejaron por un día sus disputas internas y proyectaron una imagen de unidad.

Los principales actores independentistas dan así por hecho que la sentencia será condenatoria y, después del encarcelamiento de siete miembros de los CDR acusados de terrorismo y a la espera de la sentencia contra los líderes políticos y sociales, hicieron un llamamiento a responder desde la desobediencia civil, aunque no se hizo mención alguna a una posible desobediencia institucional, que dos años después del convulso otoño soberanista del 2017 volvió a recibir el aval del Parlament la semana pasada.

“Cualquier sentencia que sea condenatoria la consideraremos injusta”, señala el texto, que afirma que en otoño de 2017 -el 20 de septiembre y el 1 de octubre- se ejercieron “derechos fundamentales” como el de manifestación, autodeterminación o participación política, “y el ejercicio de estos derechos en ningún caso puede ser considerado delito en una democracia”.

“La represión ni comienza ni acaba con este juicio. Se trata de una causa general contra todo un movimiento político y democrático con el único objetivo de pararlo e intentar destruirlo ahora que cada día es más masivo y mayoritario”, prosigue el manifiesto leído ayer.

El independentismo representado en este comunicado sostiene que “la desobediencia civil y la movilización ciudadana pacífica son los principales instrumentos que tiene la ciudadanía para responder a los abusos de poder y las situaciones de injusticia”.

Señala asimismo que la respuesta que se dé “anticipará la voluntad de volver a ejercer todos los derechos que son vulnerados” y pide movilizaciones “plurales y transversales” porque “la respuesta a una sentencia injusta nos interpela a todos y todas”.

Entre los representantes políticos presentes en el acto se contó a los dirigentes de JxCat Josep Lluís Cleries, Laura Borràs y Eduard Pujol, a Marta Vilalta en representación de ERC y a los exparlamentarios de la CUP David Fernàndez y Albert Botran.

También hicieron acto de presencia la presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, y el vicepresidente de Òmnium, Marcel Mauri.

Se adhirieron al manifiesto una treintena de entidades de la sociedad civil como el CIEMEN, UnescoCat, Irídia, Unió de Pagesos el SEPC o USTEC, entre otras. - D.N.