PAMPLONA. La presidenta de Navarra, María Chivite, ha realizado una valoración "positiva" de la nueva etapa política que comienza con el Gobierno de Pedro Sánchez, con el que espera trabajar "cuanto antes" como se ha venido haciendo con unas relaciones "fluidas, proactivas y constructivas".

Así se ha pronunciado en el pleno del Parlamento en respuesta a la pregunta formulada por el portavoz parlamentario del PSN, Ramón Alzórriz, sobre "la valoración que merece la nueva etapa para nuestro país y para Navarra, basada en el diálogo y acuerdo entre diferentes".

Alzórriz, quien ha hablado de una "jornada y una investidura histórica" para España y para Navarra, ha asegurado que "hay muchos argumentos para aplaudir el Gobierno que ha emanado de las Cortes Generales".

En su respuesta, Chivite ha explicado que su valoración es "positiva" por varias cuestiones, la primera porque era "urgente" un gobierno con plenas facultades operativas y porque España "necesitaba un Gobierno de progreso con una firme apuesta por la convivencia, el respeto de la diversidad territorial" y alineado con Navarra.

Al respecto ha añadido que comparten la mayoría de valores, lo que ayudará a la resolución de problemas y a abordar los retos a los que se enfrentan como comunidad y como país.

Chivite ha defendido el diálogo como la herramienta "fundamental y básica" en una democracia y al respecto ha aseverado que solo mediante la búsqueda de acuerdos fructíferos para la ciudadanía se podrá avanzar "más y mejor".

La presidenta ha recordado que siguió en el Congreso de los Diputados el debate de investidura en el que, ha indicado, pudo palpar de primera mano que "vivimos tiempos en los que algunos partidos políticos quieren retroceder en derechos, hablaban de políticas liberticidas, cuestionan realidades crueles como la violencia de género, los derechos del colectivo LGTBi o señalan públicamente a los inmigrantes".

Además ha añadido, cuestionan el modelo territorial y son "incapaces de reconocer que la riqueza de este país reside en gran parte en la pluralidad de este país".

"La legitimidad las dan las urnas", ha sostenido Chivite, quien ha reprochado que algunos "prefieren alimentar un clima tóxico" como el que se vive este Parlamento, ya que "prefieren los insultos a la educación y al respeto, el sectarismo al diálogo con esa doble vara de medir, porque lo que ellos hacen siempre está bien", ha dicho.

Tras afirmar que su Gobierno "no va estar en el enfrentamiento y la crispación", ha comentado que en 1993 UPN negoció los presupuestos con Herri Batasuna, en los tiempos en los que "ETA mataba y que parece que estuvo bien y justificado por un interés general porque era la derecha la que se sentaba".

Sin embargo, ha añadido, si lo hace la izquierda, cuando ETA no mata y "siempre que se respete la ley" es una "traición a Navarra y a España". "Lecciones ninguna", ha concluido.