El senador autonómico por Navarra, Koldo Martínez (Geroa Bai), considera que "tras la fusión Caixabank-Bankia se puede esconder una operación política con el objeto de controlar el primer banco español" y ha calificado la operación de "privatización encubierta".

En el pleno del Senado, Koldo Martínez ha preguntado a la vicepresidenta segunda y ministra de Economía, Nadia Calviño, acerca de "cuáles son los beneficios para la sociedad de esta fusión cuando las ventajas para la consolidación del sistema financiero no son evidentes, pero sí las consecuencias negativas con más de 8.000 despidos, cierre de cientos de sucursales y pérdida de ingresos para la Hacienda española y la Hacienda foral navarra".

"Los ciudadanos hemos rescatado a la banca española con miles de millones de euros en ayudas y hasta con un banco malo. Y mientras la banca y sus directivos aumentan sus ganancias de manera escandalosa, desde 2014 se han perdido 27.000 empleos en banca -más de 100.000 desde 2008- y se han cerrado 10.000 sucursales, con lo que han empeorado el paro y la atención al ciudadano, y disminuido la recaudación fiscal", ha señalado el senador de Geroa Bai.

Koldo Martínez ha recordado que Caixabank ha reconocido unos beneficios extraordinarios de 4.300 millones de euros, "ya que el valor contable de Bankia es claramente superior a lo que ha pagado la entidad catalana". "Esta película -ha añadido el senador de Geroa Bai- ya la vimos en Navarra cuando Caja Navarra desapareció en CaixaBank, solo que aquello se descubrió años después y lo de ahora es en directo y se puede evitar. Esta es una operación fundamentalmente política en la que el PSOE, a través de su sucursal catalana, quiere hacerse con el poder de CaixaBank. Las conversaciones entre el antiguo ministro Salvador Illa y el presidente de la entidad pueden llevarnos a pensar en eso", ha afirmado Koldo Martínez.