Estafa agravada, falsedad en documento mercantil y blanqueo de capitales. Son los delitos que les imputan a los empresarios Luis Medina Abascal y Alberto Javier Luceño en la compraventa de material sanitario al Ayuntamiento de Madrid al comienzo de la pandemia.

El titular del Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid ya ha admitido a trámite la querella de la Fiscalía Anticorrupción contra Medina y Luceño, quienes se embolsaron cerca de seis millones de euros en comisiones por contratos de mascarillas, test y guantes durante el confinamiento y por los que el Consistorio madrileño pagó 11,9 millones. Estos productos se pagaron a un precio muy superior al que pedía el vendedor y, además, tenían una calidad muy inferior a la ofertada.

En concreto, Luis Medina, hijo de Naty Abascal y el fallecido Duque de Feria, se embolsó por estas gestiones un millón de euros tras contactar con el Ayuntamiento de Madrid a través de un primo del alcalde José Luis Martínez Almeida. Se trata de una cantidad muy inferior a la que se llevó Luceño, quien se metió al bolsillo cinco millones de euros tras presentarse como "experto en importación" de productos asiáticos.

Coches, un yate, Rolex...

¿Y en que se gastaron este dinero caído del cielo Medina y Luceño? Según el escrito de la Fiscalía, Medina adquirió un yate modelo Eagle 44, llamado 'Feria' y por el que pagó 325.515 euros; posteriormente lo registró en el Registry of Pleasure Yachts de Gibraltar.

Luceño, con sus cuatro millones, se dedicó a comprar principalmente coches de alta gama. Así, adquirió un Ferrari 812 Superfast valorado en 355.000 euros; Aston Martin DBS Superleggera, de 293.000 euros; un Lamborghini Huracan Evo Spider, de 299.999; un McLaren 720S, de 250.000, y un Aston Martin DB11, de 160.000, un Mercedes AMG GT 63S (149.999,01 euros); otro Mercedes SCL 300 (54.500 euros); un Range Rover Sport (102.000 euros), y un BMW I8 Roadster (121.000 euros). También pago 91.800 euros por una moto KTM X BOW.

Con excepción del Aston Martin, "estos vehículos fueron facturados a la sociedad de la que Alberto Luceño es administrador y accionista único, y a la que imputó el cobro de las comisiones percibidas por las operaciones de compraventa de material sanitario", indica la Fiscalía.

A todo esto hay que sumar tres relojes Rolex valorados en más de 42.000 euros, una vivienda en Pozuelo de Alarcón valorada en 1.107.400 euros y además disfrutó de unas vacaciones en Marbella en un hotel de lujo por las que abonó 60.000 euros.