Pamplona - Camino de Gurs recoge una larga serie de testimonios. Todas las historias son diferentes, aunque en el fondo son las mismas. Unos jóvenes idealistas huyen de Navarra al desatarse la represión franquista y acaban reenganchándose en la Guerra Civil desde el lado republicano. Algunos fallecen en combate. Otros se ven obligados a emprender un nuevo éxodo tras caer el frente de Catalunya. Las vidas aquí se dividen entre los que embarcan para Latinoamérica, los que acaban militando en la resistencia ante los nazis o los que consiguen cruzar de nueva frontera muchos años después. Gurs fue un nuevo cruce de caminos para muchos de ellos. Todas estas historias se mezclan en las palabras de los familiares de los hermanos Chivite (Olite), Félix Sembroiz (Ujué), Primitivo Lorea (Tafalla), Pascasio Arbiol (Carcastillo), Concha, Víctor y Esteban García (Bera), Julio Bator (Urroz), José, Pablo y Luis Roa (Pamplona), Benedicto Ochoa (Ujué), Martín Soler (Alsasua), Roberto e Isaac Garcés (Isaba)... De Isaba también tuvo que escaparse para salvar su vida Calixto Ezker, que volvió al frente republicano tras cruzar los Pirineos. A través de un contacto en la vecina Maule, localidad en la que luego habría una potente colonia de refugiados, envió su foto con unos milicianos en Barcelona. A partir de ahí sólo el recuerdo de un vecino del pueblo que dijo verlo “en una camilla en un campo con playa...”. Más suerte tuvo el pintor Gerardo Lizarraga, que fue salvado in extremis al ser reconocido como artista en un noticiero por una amiga francesa. Blanca Oria también ha llevado al cine documental su historia en Estrellado. - J.I.C.
