pamplona - El número de siniestros fraudulentos detectados en España aumentó un 12,5% en 2018 respecto al ejercicio precedente, sobrepasando los 12.500 casos, y Navarra ha sido una de las comunidades en las que la tasa de fraude se ha disparado. Si la media estatal se sitúa en el 1,88% en cuanto a intentos de engañar a las aseguradoras a través del cobro de partes falsos, en la Comunidad Foral dicha tasa se sitúa en el 2,4% en el último estudio de 2018, durante el análisis efectuado en 2016 se anclaba en el 1,2%, según se desprende del sexto informe elaborado por Axa denominado Mapa del Fraude.

Durante el año 2017 Navarra ya había crecido considerablemente en los timos a los seguros puesto que se situaba en una tasa del 2,1%, por lo que el pasado año creció un 14% este tipo de tentativas. Los intentos de engaño que se dan en Navarra solo son superados en datos porcentuales por Cantabria (3%), La Rioja (2,94%) y Galicia (2,52%). Por el contrario, las comunidades con menor tasa de fraude al seguro son Madrid (1%), CAV (1,32%), Castilla-La Mancha (1,54%) y Catalunya y Aragón (ambas con 1,73%).

Durante el año 2018, Axa evitó pagos indemnizatorios fraudulentos en todos sus ramos -vida, no vida, particulares y empresas- por un importe total de 66,2 millones de euros, lo que supone un incremento de más del 5,5% interanual. “El volumen de clientes tentados a cometer un fraude es muy reducido, la gran mayoría de los siniestros son reales y reflejan las situaciones de riesgos normales que se producen en la vida cotidiana, siendo solo una minoría los que tratan de obtener una indemnización ilícita a través del engaño”, indicó el director de fraude de Axa España, Philippe de Mingo.

SINIESTROS DE TRÁFICO, EL QUE MÁS DEFRAUDA Por sectores, en el caso de automóviles se mantiene con el mayor porcentaje de fraude al seguro, con casi la mitad (49%), si bien ha sufrido un descenso importante, de hasta en 10 puntos durante el último año. Los partes falsos en este ámbito suelen estar relacionados con la conducción del vehículo (88%). En el ramo de multirriesgos, que incluye comercio, hogar y oficinas, se aprecia un aumento de diez puntos respecto al ejercicio anterior, hasta alcanzar el 40%. Detrás de este aumento, según recoge AXA, está el repunte del fraude en el hogar relacionado con daños eléctricos. En cuanto a diversos, como transportes, industrias, salud, accidentes o vida, se mantuvo el porcentaje de 2017, un 11%.

Por primera vez, el estudio de 2018 incluye un análisis del fraude por género: más del 75% del fraude en autos lo cometieron hombre. Pero en hogares, las estafas cometidas por varones y mujeres están más equilibradas -59% en el primer caso y el 41% restante, el segundo-.

Fraude ocasional u oportunista. Es aquel que aprovecha la realidad de un siniestro para introducir daños preexistentes.

Fraude premeditado. Se trata de aquellos casos en los que los daños que se reclaman son reales o ficticios, pero todos han sido planificados con antelación. En ellos se suelen ver implicadas varias personas.

Fraude organizado. Es sin duda el más peligroso. Se trata de bandas organizadas y ocasionalmente apoyadas por profesionales que buscan la industrialización de su proceso delictivo, lo que supone un fuerte perjuicio económico. Representan un gran riesgo.