donostia/PAMPLONA - La menor detenida el domingo en Arrasate, supuesta madre de la bebé hallada sin vida bajo un coche, continuaba ayer bajo custodia de la Ertzaintza tras haber recibido atención médica por una hemorragia. La joven, de 17 años y residente en una localidad de la Merindad de Sangüesa cercana a Pamplona, habría acudido a pasar el fin de semana a la casa de su abuela en el municipio guipuzcoano junto a su novio, domiciliado en Eskoriatza.

La Fiscalía de Menores de Gipuzkoa se ha hecho cargo de la investigación y ayer mismo se personó en el Hospital Comarcal del Alto Deba, donde continúa ingresada desde el domingo la supuesta madre de al recién nacida. La Policía autonómica, no obstante, no confirmó si, tras la intervención médica, se le tomó declaración o esta se llevará a cabo durante la jornada de hoy.

La menor habría acudido al centro médico por su propia cuenta como consecuencia de una hemorragia. Al advertir que la herida era consecuencia de un parto, los propios trabajadores del hospital habrían relacionado el caso con la aparición de la bebé y procedieron a avisar a los agentes, quienes detuvieron a la joven en el mismo lugar.

A pesar de que la chica reside con su familia en una localidad de la Merindad de Sangüesa próxima a Pamplona, fuentes conocedoras del caso indicaron que es habitual verla en el municipio guipuzcoano, donde vive su abuela. Esta, de hecho, lo hace en la misma calle Galicia, en la zona residencial Cristo Obrero del barrio Santa Teresa, en la que fue encontrada la bebé. Al parecer, la joven se habría desplazado el viernes a Arrasate para pasar el fin de semana con su novio, un joven con domicilio en Eskoriatza.

Al tratarse de una menor, tanto la Ertzaintza como la Fiscalía prosiguen con la investigación sin dar a conocer nuevos detalles sobre la pareja. Por su parte, la Consejera de Seguridad del Gobierno Vasco, Estefanía Beltrán de Heredia, afirmó ayer a preguntas de los periodistas que de tratarse de la madre de la recién nacida, la menor se enfrentaría a “un delito y una condena muy importantes”.

Conmoción en el municipio Al tratarse de una joven habitual en Arrasate, muchos vecinos mostraron ayer su incredulidad por lo ocurrido el domingo. Ninguno habría imaginado jamás que algo así pudiese llegar a ocurrir en una de las calles del municipio.

Precisamente fue uno de los vecinos quien halló a la bebé el domingo al mediodía mientras paseaba a su perro. El hombre, alertado por un charco de sangre en la calle, localizó a la recién nacida debajo de un coche todavía con vida. No obstante, los servicios sanitarios desplazados hasta el lugar no pudieron más que certificar la muerte de la bebé, a la par que la Ertzaintza iniciaba la búsqueda de la posible madre entre los portales de la misma calle.

Al recibir el aviso de que una joven había ingresado en el Hospital Alto Deba como consecuencia de una hemorragia, el foco de los agentes se centró en el número 8 de la vía, donde residía la abuela de la menor. Tras determinar que la herida era fruto de un parto, los ertzainas detuvieron a la menor que continúa en el centro hospitalario ingresada por la intervención.

Por su parte, el cadáver de la niña recién nacida, junto con los restos de placenta hallados en el lugar, fue trasladado al Instituto de Patología Forense de Donostia para que le fuera practicada la correspondiente autopsia.- A.Zubiria/J.M.S.