San Sebastián. - Alrededor de 800 personas, según los convocantes, han participado este domingo en la Marcha contra el Racismo y la Xenofobia en San Sebastián que en su 23 edición ha centrado su mensaje en el "peligro de las extremas derechas" para las políticas migratorias y el asilo.

La manifestación ha discurrido entre Pasaia y San Sebastián tras una pancarta sin leyenda, ya que las organizaciones que han convocado la protesta, un total de 47, han propuesto el lema "Elige un eslogan contra el racismo" para poner el acento en que el voto en las próximas elecciones generales y europeas puede repercutir en "ampliar o restringir los derechos de las personas".

Las asociaciones y ongs que han organizado la manifestación han alertado de los discursos xenófobos "que tienen un amplio predicamento en la mayoría de los países de la UE y que comienzan a asentarse en España".

En este sentido han advertido de las consecuencias "negativas" que estos discursos podrían tener en la política de inmigración y en el derecho de asilo y refugio, que se verían "recortados" al tiempo que "aumentarían las trabas al acogimiento".

El triunfo de la extrema derecha acarrearía, agregan los convocantes, el "incremento de las discriminaciones" mediante la aplicación de políticas de "prioridad nacional" que reforzarían la exclusión de los derechos laborales y sociales y generarían la confrontación entre los conceptos de "nosotros" y "ellos".

Las organizaciones promotoras de la manifestación, entre las que se encuentran SOS Racismo, Medicus Mundi Gipuzkoa y la Coordinadora de ONGs de Desarrollo de Euskadi, propugnan el "respeto y el reforzamiento del derecho de asilo y refugio" y abogan por las políticas basadas en la inserción social y favorezan la integración en todos los ámbitos.EFE