pamplona - Natalia Sánchez Uribe, la española hallada con vida este miércoles en el hospital psiquiátrico Henry Ey de París, pidió ayuda a unos turistas españoles para salir de la capital francesa el mismo día de su desaparición, el pasado 1 de mayo, según publicó ayer el diario ABC, tras hablar con fuentes del caso.

La joven de 22 años natural de Palma de Mallorca se encontró con los españoles en un autobús, donde empezó a entablar conversación con ellos, tras lo que les dijo que quería marcharse, aunque no sabía cómo, de la ciudad, donde estudiaba con una Beca Erasmus en la Escuela de Economía de La Sorbona, en la que le quedaban dos semanas para terminar.

Según expresó la pareja, notaron en Sánchez, que no llevaba consigo ninguna pertenencia, una actitud extraña, por lo que trataron de tranquilizarla, tras lo que la joven se mostró desconfiada y se marchó. De vuelta a España, los españoles se enteraron de que sus padres la estaban buscando, por lo que alertaron a la Guardia Civil y a la Fundación QSD. Antes de la conversación en el autobús, otro español se encontró con la joven en los Jardines de Luxemburgo, donde, muy asustada, le pidió usar su teléfono móvil. Después, el varón llamó al consulado de España en París, donde dijo que una joven que se encontraba desorientada le había pedido el móvil.

Al día siguiente, la estudiante de Economía y Empresa en la Universidad Autónoma de Barcelona había quedado con su casero para entregarle las llaves del piso en el que llevaba alojada desde septiembre, tras acabarse el contrato de su piso, pero no apareció. Sánchez iba a trasladarse a la casa de una amiga para pasar los quince días que le quedaban en París, pero tampoco acabó la mudanza, ya que, si bien llevó dos maletas, la tercera no llegó a trasladarla al nuevo piso. Tres días después de que se perdiera el contacto con la joven, el sábado 4 el consulado ya tenía las denuncias de los padres de Sánchez, así como los datos aportados por la Policía local y la Guardia Civil, aunque se mantuvieron en secreto para no perjudicar a la búsqueda. Mientras en España se investigaba su desaparición, Francia no la difundió, por lo que se tardó una semana en saber del paradero de la joven.

No se sabe exactamente qué día encontró la Policía a la joven, que informó el miércoles de que fue hace “varios días”, cuando la vieron desorientada y perdida en la calle, por lo que la trasladaron al centro sanitario de Henry Ey. En ese momento no pudieron identificarla, ya que no portaba ningún documento. Las causas de lo que le ocurrió a Sánchez todavía se desconocen, aunque unos amigos de la joven expusieron que “estaba rara” en las últimas semanas, así como que se sentía inadaptada y decía que la seguían y que veía cosas extrañas a su alrededor.

El psiquiatra José Carlos Fuertes apuntó en Espejo Público que un estado de desorientación como el que padeció la joven de 22 años puede deberse a un cuadro disociativo causado por la presión que sentía. “La causa puede ser un cuadro de estrés continuo, un episodio de confusión y alejamiento de la realidad”. - D.N.