La temida vuelta al cole, que se dio ayer en la mayoría de centros de primaria de Navarra, no dejó indiferente a nadie: niños que no quieren volver a las aulas y padres y madres que no pueden despedirse de sus pequeños, aunque solo sea por unas horas. Esta imagen, que se repite cada año en la puerta de los centros escolares, nada tuvo que ver con la estampa vivida ayer en el Colegio Público Iturrama, y es que cuatro perros de educación asistida esperaban a los pequeños para acompañarlos en su primer día de clase.

La iniciativa del recibimiento estuvo especialmente enfocada a tranquilizar al alumnado de tres años y también a aquellos niños que son nuevos en el centro. Aunque poco les duró el disgusto de volver a abrir los libros a algunos, que ya solo tenían ojos para Laika (golden), Bamba (cavalier), Tana (labrador) y Trisquil (border collie).

Purina y el Centro de Terapias Asistidas con Canes (CTAC) presentaron ayer en este colegio de Pamplona Aprender juntos es mejor, el primer programa nacional que lleva perros de educación asistida a las aulas para mostrar los beneficios de las mascotas en la educación de los más pequeños. Tras el recibimiento del equipo de técnicos y los perros del CTAC a primera hora de la mañana, 40 niños y niñas de 3º de primaria pudieron participar en una serie de actividades donde los canes y sus responsables mostraron los beneficios pedagógicos de la inclusión de los perros de educación asistida en el sistema educativo, como son “el aumento de la autoestima, la confianza, la motivación o la concentración de los niños”, según explicó Sonia Sáez, veterinaria y portavoz de Purina. “Creemos que los animales de compañía pueden llegar a ser una ayuda en nuestro sistema educativo. El vínculo emocional que se establece entre los niños y los perros, tratado como una herramienta curricular, enriquece el proceso de aprendizaje de los alumnos. Un perro inspira ternura, pero también responsabilidad”, añadió.

¿perros que saben leer? Al comienzo de la jornada los educadores concienciaron al alumnado sobre la tenencia responsable de mascotas. “Se trata de formar a los propietarios del futuro, les hablamos de los beneficios de tener una mascota, pero también de las responsabilidades que acarrea”, apuntó Sáez.

Después se desarrolló un insólito taller de lectura en el que participaron tanto perros como escolares. “Enseñamos a los perros a leer a su manera. Durante el proceso de educación ponemos un premio (una golosina para perros), en cada página. Así, con el tiempo, el perro relaciona los libros con algo positivo a lo que prestar atención. De la misma forma, los niños sienten curiosidad sobre el interés del perro, lo que hace que ellos también se interesen por la lectura”. Además, la portavoz de Purina subrayó que los niños se sienten más cómodos al leer ante los perros, porque estos no les juzgan: “Este sistema es muy beneficioso, especialmente para aquellos niños que pueden tener una mayor dificultar al leer. Les ayuda mucho en su autoestima, en su confianza y les aporta mucha tranquilidad”.

El Post-it

‘Aprender juntos es mejor’. El programa Aprender juntos es mejor, impulsado por Purina y dirigida por el centro de terapias asistidas con canes (CTAC), es una iniciativa que, con la ayuda de perros preparados, desarrolla jornadas de educación asistida con canes dirigidas a estudiantes de Primaria y profesores. Esta actividad ya se ha llevado a cabo en más de 80 colegios de la Comunidad de Madrid, Cataluña, islas baleares, la CAV, Aragón, Murcia, Galicia, Comunidad Valenciana, Andalucía, y ahora Navarra.

Perros de terapia. El de terapia tiene que ser el típico perro faldero que te rompe el corazón cuando te mira. Son animales que tocan a nivel psicológico y emocional y reconfortan a las personas que más lo necesitan. Se les enseña a ponerte la barbilla encima de la rodilla, a dar la patita o a recoger la pelota. Son perros a los que se les enseña a dar y querer mucha atención. Se suele trabajar con estos animales, por ejemplo, en hospitales con pacientes pediátricos.

Perros de asistencia. Son muy estrictos en su educación. Estos perros trabajan, por ejemplo, con niños autistas o personas con discapacidades psíquicas y físicas. En cierto modo, se les educa para ser cuidadores y estar alerta. Estos perros llevan un chaleco identificativo y saben que cuando lo llevan puesto están cumpliendo un cometido que no pueden desatender. Ofrecen soporte asistencial a quien lo necesita.