- "Podemos asegurar que la calidad de cuidados que hemos ofrecido hasta el final de su vida ha sido excepcional". Así de contundente se pronuncia Beatriz Lacabe, secretaria técnica de Lares, organización que agrupa a 37 residencias de personas mayores y dos centros de día de Navarra, en los que viven 2.500 personas, de un total de 4.000, y trabajan 1.800 profesionales.

Son las residencias sin ánimo de lucro de la Comunidad Foral que, explica Beatriz Lacabe, en líneas generales, son organismos autónomos que dependen de ayuntamientos, mancomunidades y fundaciones.

Como el resto de residencias navarras, sus personas usuarias no están autorizadas aún para salir y las visitas de familiares se limitan a residentes que están en sus últimas horas o días de vida. Es fundamental por ello tener confianza en el personal cuidador y que el centro sea capaz de habilitar vías de comunicación. Beatriz Lacabe destaca el papel "reivindicativo" de un sector que "requiere cambios con un criterio profesional que centre todas las estrategias en las personas que cuidamos".

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Los centros de Lares están viviendo la pandemia, "la verdad, con mucha preocupación", asegura Lacabe. "Esta sobrepasando cualquier expectativa y lo cierto es que nos estamos adaptando a cada instrucción que nos dan las administraciones públicas. Llevamos tres años impulsando un modelo asistencial de atención integral centrado en la persona que busca y prioriza el respeto de la dignidad y calidad de vida en la atención de las personas mayores que precisan cuidados en centros residenciales. Se trata de un modelo que convierta los centros en verdaderos hogares".

Y claro, explica la secretaria técnica, "de repente viene la pandemia y tenemos que reconfigurar las estructuras y rutinas para proteger a los mayores de contagios exteriores mediante un aislamiento mucho más duro de lo que se puede pensar. Aun así, hemos tenido dos casos: centros que han tenido positivos, y centros que aun se mantienen sin positivos". La coordinación con los ayuntamientos, familias y administraciones, "ha sido constante y continua. Esto no significa que no se hayan generado situaciones complicadas".

Indica Lacabe que "el Departamento de Derechos Sociales ha estado en contacto con nosotros diariamente, recogiendo nuestras necesidades. Aun así, hemos echado de menos ese espacio de coordinación sociosanitaria que venimos reivindicando año tras año y que a pesar de tenerlo recogido en un convenio que se firmó el pasado año, no había sido considerado por el Departamento de Salud como estratégico. El tiempo nos ha dado, tristemente, la razón".

La pandemia ha golpeado con dureza a las personas mayores, por su edad, y más a las que viven en residencias. A tenor de la información facilitada ayer por el departamento, parece que se ha logrado cierto freno. "Indudablemente ha habido fallecidos. Siempre los tenemos en las residencias en épocas de gripe, y ahora no podía ser menos. Y mas allá de los números, los fallecimientos nos han llenado de tristeza porque son personas que vivían con nosotros, que tenían compañeros en las propias residencias€.", lamenta Lacabe.

Y reitera "lo que si podemos asegurar es que la calidad de cuidados que hemos ofrecido hasta el final de su vida ha sido excepcional desde el primer momento. No hace falta tener un protocolo para saber como actuar en esos casos. La parte ética y humana es clave en nuestra profesión y, en ese sentido, creemos que en una gran mayoría de los casos esta parte de la pandemia ha quedado perfectamente cubierta en los Centros Lares".

El grupo Lares ha difundido en redes sociales un vídeo que refleja el día a día se la vida cotidiana de las personas que residen en comunidad. "Este video lo promovimos junto con la entidad que nos ayuda con la parte de desarrollo estratégico" y pretende reconocer "a las trabajadoras y trabajadores de los centros residenciales. Hemos estado años reivindicando por sus condiciones salariales, pidiendo a las administraciones un convenio colectivo sectorial que mejorara su reconocimiento y no solo moral, sino también económico. El día internacional del trabajo era un buen momento para lanzarlo". Asegura Lacabe que "los equipos se están comportando como auténticos titanes. No solo cubren los cuidados habituales, sino la parte emocional de las personas más vulnerables, acompañándolos y aportando esa parte de cariño que sus familiares no pueden darles ahora. No nos olvidemos que no se puede cuidar sin cariño, y nosotros creemos en ello".

La pandemia ha podido suponer cierto revulsivo a la hora de optar por este modo de vida. A la pregunta de ¿tienen plazas libres?, Lacabe precisa: "En general los centros suelen tener rotación y siempre hay alguna plaza libre. Ahora, tras este primer mes y medio de pandemia existen algunas más, pero Derechos Sociales ha comenzado a realizar valoraciones y volvemos a tener ingresos".

En cuanto a plazas concertadas, "el año pasado firmamos el acuerdo marco de concertación de plazas con Derechos Sociales. Ha sido un antes y un después porque se reconocen tres puntos fundamentales: la implantación del modelo de atención centrado en la persona, un aumento considerable de ratios de personal y un reconocimiento de convenios colectivos más generosos". Las plazas de concierto son muchas "y cualquier persona que cumpla las condiciones de dependencia requeridas puede optar a una plaza sin problema".

Con la pandemia han reforzado personal. "Me alegra que nos hagas esa pregunta porque es un tema que tendremos que valorar ahora con el Gobierno de Navarra. Hemos tenido que reforzar personal en todas las categorías por varios motivos: prevención, mejora de limpieza y desinfección, personal cuidador, enfermería, incluso personal ocupacional, por aumento de carga de trabajo al tener que sectorizar los centros y por absentismo al tener que cubrir bajas de trabajadoras. Hemos tenido que dejar libres para sectorizar y habilitar zonas de aislamiento y todo ello va a suponer un mal resultado económico para las residencias que esperamos sea cubierto por el Gobierno de Navarra. Les agradecemos el reconocimiento, pero también económico para poder continuar con nuestra labor. Recordemos que somos entidades sin ánimo de lucro".

"Hemos tenido que reforzar las plantillas tras sectorizar el interior de los centros"

"Los fallecimientos nos han llenado de tristeza porque son personas que vivían con nosotros"

Secretaria Técnica de Lares