A estas alturas de la pandemia, con la experiencia de casi ocho meses a las espaldas, se podía deducir que una vez iniciado el curso escolar los casos de contagios iban a seguir dándose inevitablemente. Tres semanas después de que los y las alumnas volvieran a las aulas de forma presencial tras un parón de seis meses, la cifra de menores de 14 años que han dado positivo por covid-19 asciende a 945, aunque en más del 85% de los casos han contraído el virus en el entorno familiar y social, no en el aula. En este sentido, desde que comenzara el presente curso escolar 2020-21 el pasado 7 de septiembre -algunos centros, aunque la minoría, comenzaron el día 4- y hasta ayer, una media diaria de 49 menores de esta franja de edad han arrojado un resultado positivo en una prueba PCR en Navarra.

La detección precoz de los casos y su aislamiento, así como la de los contactos estrechos, consiguió antes de que los centros abrieran sus puertas localizar a más de 200 menores que dieron positivo en covid-19. Sin embargo, es ahora una vez que los niños y niñas han empezado a relacionarse de nuevo con la vuelta a clase, cuando el Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea (SNS-O) está realizando un mayor número de pruebas PCR, poniendo especial énfasis en el seguimiento a los más jóvenes.

Desde la vuelta al cole, hace ahora 20 días, el número global de infectados confirmados en la Comunidad Foral ha sido de 5.740. De todos estos, solo un 16,49% de los casos afecta a escolares de entre 0 y 14 años, una incidencia que demuestra un aumento sostenido (habida cuenta de que se ha retomado la actividad escolar, el contagio es inevitable) y controlado debido a las restricciones existentes. Siendo así, el día que más menores de esta franja de edad resultaron contagiados fue el pasado 22 de septiembre, con 69 casos de los 348 positivos totales de ese día. Sin embargo, en lo que va de curso escolar, el porcentaje de menores de 14 años infectados no ha superado ningún día el 21% del total de positivos registrados en Navarra y ha oscilado en similares cifras.

En esta línea, según apuntó el consejero de Educación del Gobierno foral, Carlos Gimeno, en una entrevista a este periódico, el número de grupos de escolares confinados se ha estabilizado después de 15 días de clase. “Los confinamientos se van a seguir dando para permitir controlar la pandemia en los colegios y para preservar la salud de los menores. Estas primeras semanas serán las más complicadas de la historia de la educación de Navarra, pero estamos viendo que, en estos momentos, los colegios son los lugares mas seguros frente a la pandemia”, valoró Gimeno.

Sus palabras las ratifica el último Informe Epidemiológico del Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra (ISPLN), correspondiente a la semana del 14 al 20 de septiembre, muestra que tan solo el 12% de los contagios en menores de 5 años y el 8% de entre 5 y 14 años fueron asociados al ámbito escolar. Así, los menores de 5 años dieron lugar la semana pasada al 4% de los casos confirmados, y el conjunto de niños menores de 15 años al 15%.

Estos contagios no se están dando necesariamente por el hecho de que los colegios hayan abiertos sus puertas o existan disfunciones en las medidas de prevención. Educación contempla como objetivo capital del protocolo que ha implantado no tanto que se eviten esos contagios, sino que se neutralicen lo más rápido posible y evitar así que esos casos se propaguen dentro del centro escolar de manera descontrolada. Así, se trataría de atajar brotes en cuanto se detecta el positivo, y para ello se ha decidido aislar a toda la clase de Infantil y Primaria a la primera comunicación.

En este sentido, el consejero de Educación se reafirmó en la prioridad de mantener la presencialidad a todos los niveles educativos, tanto en la enseñanza esencial como en la post-obligatoria, y en la totalidad de centros de Navarra, un “objetivo irrenunciable para garantizar la equidad y la igualdad de oportunidades para todos los escolares”, aseveró Gimeno. Se mantiene, por lo tanto, la presencialidad plena en todos los centros, con mayor o menor incidencia del virus.

La mejor muestra de vocación del Departamento de mantener las aulas abiertas es la localidad de Peralta, donde el Gobierno foral ha decretado un confinamiento desde el pasado jueves y durante una semana. Educación no se plantea, sin embargo, cerrar el colegio (donde se actúa igual que en el resto de Navarra y se han aislado algunas clases con casos puntuales de positivos) y el instituto del municipio. En todo caso, Gimeno apuntó que sería el Instituto de Salud Pública de Navarra el encargado de decidir el cierre de algún centro, algo que, por el momento, no está encima de la mesa.

baja transmisión en el aula: 6,4% POSITIVOS Desde que comenzara el curso educativo -correspondiente a los datos desde el 4 y hasta el 25 de septiembre-, la cifra de estudiantes que han guardado cuarentena en su domicilio a causa del coronavirus asciende a 4.015 -pertenecen a 198 grupos de convivencia estables de toda la Comunidad Foral- del total de 62.009 alumnos y alumnas entre los ciclos de Infantil y Primaria. Estos suponen el 6,47% del alumnado navarro -solo una parte menor de estos escolares ha dado positivo en una PCR-. El resto están confinados por ser considerados contactos estrechos de sus compañeros contagiados.

De esta forma, más del 93% de los niños y jóvenes están teniendo una docencia presencial desde el comienzo del curso. El resto de estudiantes está o ha tenido que permanecer en casa como marca el protocolo durante 10 días desde que estuvieron en contacto con una persona que registrara una PCR positiva. Una situación que lejos de ser la ideal evita que la totalidad del alumnado tenga que permanecer en casa si la transmisión del virus se descontrolase en los centros. En la actualidad, 2.160 escolares que habían estado aislados ya se han reincorporado a sus aulas y 1.855 estudiantes permanecen confinados.

189 escolares confinados el viernes. Un total de 189 escolares fueron sido confinados el pasado viernes, 25 de septiembre, en Navarra. Pertenecen a 11 aulas de siete colegios de la Comunidad foral y, al mismo tiempo, otros 29 escolares fueron desconfinados y vuelven a recibir educación presencial en sus centros educativos. Con ellos son ya 2.160 escolares de 106 grupos los que han vuelto a la actividad docente presencial.

La pediatra Marta Ramos Zugasti aseguró que en Atención Primaria “no se ha dejado de atender presencialmente en ningún momento de la epidemia” pero que “buscando la seguridad de los pacientes y el orientar la atención en el circuito adecuado (infeccioso o no infeccioso), se decidió que la primera atención que recibiera el paciente fuera telefónica”. Si se puede responder a su necesidad a través del teléfono se hace así y si necesita una atención presencial se le da una cita en el centro de salud. Se ha comenzado a dar también citas presenciales directas según una serie de motivos que los profesionales del centro determinan, con el fin de que aquellos pacientes que van a tener la necesidad de ser vistos y explorados se eviten en lo posible pasos intermedios. Ramos recordó que “los centros de salud están siendo la principal puerta de entrada de todos los casos compatibles con covid” y puso en valor “el esfuerzo que se está haciendo, no sólo de asumir la gran demanda que éstos generan, sino de no desatender el resto de necesidades de la población”.