- ¿Cuál es la explicación geológica de lo que está ocurriendo?

-La explicación no es sencilla. Está claro que estos terremotos se deben a fallas tectónicas. Una falla es una fractura en el terreno que con el paso del tiempo va acumulando deformaciones a ambos lados de la fractura, cuando las tensiones acumuladas superan el rozamiento de ambos bloques, se produce un desplazamiento repentino de la falla, y como el medio se comporta de forma elástica se propagan las ondas sísmicas. Esto se llama Teoría del Rebote Elástico. El problema es que en la zona epicentral de los terremotos que están ocurriendo en Navarra no hay constancia de fallas activas que puedan estar asociadas a estos terremotos. Hay que seguir investigando sobre ellas.

¿No son fallas conocidas?

-Si vas a los mapas geológicos, no están descritas o cartografiadas fallas que deban producir terremotos en esa zona. Deben estar, pero no se han estudiado lo suficiente. Cuando hay terremotos tectónicos, tiene que haber fallas. Si se tiene muy buena localización de los epicentros, estos terremotos pequeños siguen la línea de la falla. En la fractura, en el corte, se producen los terremotos. Los datos que obtenemos están abiertos a la comunidad científica para que puedan hacer más estudios sobre ellos. Hay otras formas de verificar las fallas, como por ejemplo mediante sondeos.

¿Se puede prever cuándo cesarán los movimientos?

-Es la eterna pregunta. No, nadie puede predecir con seguridad al 100%, en sismología. Es una ciencia a la que le queda mucho camino por investigar, los procesos sísmicos son procesos muy difíciles de estudiar en el interior de la tierra, difíciles de simular en laboratorio donde intervienen muchas variables. Un terremoto es hasta cierto punto su proceso caótico, donde pequeñas variaciones de las condiciones producen resultados repentinos y no esperables, estos modelos se estudian con técnicas fractales.

¿Se puede descartar un terremoto de mayor magnitud que los registrados hasta la fecha?

-En conexión con la pregunta anterior no se puede descartar nada. Aunque la experiencia, y la historia pasada de esta zona, y de la Península en general, no es esperable que ocurran terremotos mayores, en un sentido probabilístico. Los terremotos recientemente acaecidos, han ocurrido en otras ocasiones, no es una novedad, en la historia geología estos eventos puede ser algo normal.

¿Estos episodios van a ser más suaves o más intensos en el futuro?

-La geología es una ciencia que trata con periodos de tiempo de miles o millones de años. Lo cual no es esperable que las condiciones geológicas cambien en poco tiempo.

¿Qué mensaje de tranquilidad puede trasladar a los vecinos de Lizoáin y otras localidades que son epicentro de los terremotos?

-Estamos en un país de sismicidad baja-moderada, Navarra más moderada si cabe. Esta serie de terremotos es algo anormal para la gente, pero si uno se extiende en periodos de tiempo más grandes, estos es más normal, ha ocurrido otras veces. Siempre con reservas, no tenemos constancia que en la zona hayan ocurrido crisis sísmicas más serias.

¿Cuál es la influencia de los pantanos de Yesa e Itoiz en la actividad sísmica?

-Desde luego no lo sabemos con seguridad. La relación entre la sismicidad inducida y los pantanos es una relación compleja, como ocurre en otras parte del mundo.

¿Podría comprometerse la estructura de las presas con los terremotos?

-Si la presa está construida según las normativas sismorresistentes, no debería haber ningún tipo de compromiso, máxime cuando la sismicidad de España es muy moderada. En sismología no se puede predecir como he venido diciendo, lo único que se puede hacer con fiabilidad es prevenir, construir de acuerdo a las normas sismorresistentes para cada zona, que pretenden crear estructuras seguras, teniendo en cuenta la peligrosidad esperada en la zona en cuestión.