- El marido de Pilar Seminario sufrió un ictus en agosto del año pasado. Tanto ella como su marido han participado en los grupos focales del estudio. Una experiencia que consideró "muy positiva", ya que "cada ictus y cada proceso son diferentes, pero hay sentimientos que son compartimos". A su vez, subrayó que le impactó "mucho escuchar a una neuróloga en el grupo sobre la importancia que le daba a lo que podíamos aportar las familias incluso en los momentos más críticos".

Seminario también expresó la importancia de no verle al paciente "como un cuerpo que hay que arreglar, sino que ese cuerpo pertenece a una persona que tiene sus manos, que tiene sus dudas, que tiene sus deseos, su vida y su familia". También remarcó la sensación de apoyo mutuo que surgió en el encuentro, "un sentimiento de solidaridad y de comprensión con otras familias y pacientes".