- El Plan Estratégico de la Policía Foral para el periodo 2020-2023 prevé incrementar la plantilla del cuerpo policial desde los actuales 1.077 efectivos hasta los 1.200, a lo que habría que sumar otros 149 agentes para tráfico, cuando Navarra asuma esta competencia.

El vicepresidente primero y consejero de Presidencia, Igualdad, Función Pública e Interior, Javier Remírez, compareció ayer acompañado por la directora general de Interior, Amparo López, y el jefe de la Policía Foral, Juan Carlos Zapico, para presentar este plan que define las líneas para el desarrollo del Cuerpo durante los próximos años y que parte de un diagnóstico de la situación de la organización realizado en los últimos meses.

El Plan prevé una inversión de más 9,5 millones en cuatro años sin contar la nueva comisaría que va dentro del proyecto del centro de coordinación de la seguridad y emergencia de Navarra, ubicado en Sanquín, en Mutilva. Una infraestructura “fundamental”, remarcó Remírez, que espera que para final de legislatura esté “francamente encaminado, si no en construcción”.

Remírez destacó que el objetivo de este plan es “avanzar a un modelo de seguridad integral, moderno y efectivo a varios niveles”, estableciendo la Policía Foral como “policía de referencia en Navarra” y en “plena colaboración con el resto de fuerzas de seguridad”. Además, apuesta por dotar al cuerpo de los “recursos necesarios” para “mejorar el ya magnífico servicio que ofrece a la sociedad”.

En este sentido, resaltó que el plan prevé dotar a la Policía Foral de los “efectivos necesarios” hasta alcanzar una plantilla de 1.200 agentes en 2023. En este sentido, apuntó que la OPE de 2020 incluye ya 45 plazas para Policía Foral. Además, a la plantilla se sumarían otras 149 personas para la vigilancia en exclusiva del tráfico. Entre estos últimos se incluirían aquellos agentes de la Guardia Civil que quisieran hacer uso de la pasarela con la Policía Foral. En cualquier caso, remarcó que la voluntad del Gobierno de Navarra es que “no haya ningún tipo de movilidad forzosa” fuera de la Comunidad Foral por parte de efectivos de la Guardia Civil.

Por su parte, el jefe de la Policía Foral, Juan Carlos Zapico, subrayó que el plan “supone un poner en orden las ideas en Policía Foral” y resaltó que, para ello, “decidimos hacerlo de manera participativa”.

La definición, planificación e implementación de la competencia de tráfico en exclusiva por la Policía Foral constituye una de las prioridades del plan. En primer lugar, se establece a lo largo de 2020 la definición del modelo operativo que va a adoptarse para ejercer en exclusiva el control y vigilancia del tráfico en navarra. Una vez definido el modelo, “se trabajará en el despliegue de recursos, así como en la adecuación de infraestructuras adquisición de vehículos, desarrollos tecnológicos y la necesaria ampliación de plantilla”. Se pretende ejecutar la transferencia de forma “ordenada, realista y efectiva, adecuando las infraestructuras a las necesidades organizativas para la plena asunción de la competencia”, explicó Amparo López.