- El ocio nocturno da este lunes un paso más hacia la nueva normalidad con el alivio de medidas restrictivas en varias comunidades, que, por lo general, presentan una buena situación epidémica, aunque según los datos de este domingo haya también algunas que han vuelto a ponerse en alerta. Tras la modificación de la declaración de actuaciones coordinadas que imponía obligaciones en el sector en toda España, el Consejo Interterritorial de Salud ha concedido libertad a las comunidades para eliminar las medidas fijadas en la hostelería, el ocio nocturno y los eventos multitudinarios.

Entre otras, Andalucía permitirá que en los pubs y discotecas de distritos que pasen al nivel 1 de alerta las personas puedan acudir a las pistas de baile al aire libre, con mascarilla y hasta las 2.00 horas. Baleares, por su parte, permite desde el sábado la actividad de los bares de copas hasta las 2.00 horas pero no se autoriza el baile y el consumo de bebidas se tiene que realizar en mesa; en el archipiélago canario, ya desde el pasado viernes 18 de junio, en las islas con un nivel de alerta epidemiológica 1 (Gran Canaria, Fuerteventura, La Palma, La Gomera y El Hierro) los establecimientos de ocio nocturno pueden abrir hasta las 2.00 horas de la madrugada.

Cantabria es la única comunidad que no ha fijado topes, por lo que los establecimientos pueden seguir abrir conforme al horario que recoge su licencia, sin restricciones; Castilla-La Mancha permite eventos multitudinarios de hasta mil personas, y Castilla y León permite aforos al 75% en karaokes.

En la Comunidad Valenciana, los pubs y discotecas pueden abrir hasta las 2.00 de la madrugada y se establece un aforo del 50% en los espacios de interior y del 100 % en terrazas, con un máximo de 6 personas por mesa en interiores y 10 en terrazas. Eso sí, están prohibidos los bailes y karaokes, y solo se permiten las actuaciones de grupos profesionales o DJ.

Al igual que en Navarra, en Galicia los locales de ocio nocturno siguen cerrados al público, cuya apertura está prevista, inicialmente, a partir del 1 de julio.

Esta relajación en algunas de las restricciones para frenar el avance del virus contrasta con la alerta que ha saltado en algunas de esta comunidades ante el aumento de casos en los últimos días. El caso, por ejemplo, de Cantabria, donde los nuevos contagios se han disparado en las últimas 24 horas al haberse registrado ayer 95 positivos, una cifra que dobla los 47 del día anterior y que podría estar relacionada con los 31 contagios detectados en las celebraciones de fin de curso y la EBAU, cuyos contactos superaban los 200.

El caso es que la comunidad cántabra no había registrado un número tan elevado de contagios en 24 horas desde comienzos del mes de mayo, que ha hecho también incrementar la incidencia acumulada a 14 días (de los 67 casos por cada 100.000 a los 79 de ayer) y a siete días (donde ha pasado de 39 a 55).

También hay cierta alerta en Cataluña, donde, a pesar de que las autoridades aseguran que los datos epidémicos están bajo control, se registró un ligero repunte, en la velocidad de propagación (ha subido dos centésimas hasta situarse en 0.96 puntos), en el riesgo de rebrote (81 frente a los 79 del sábado) y en la presión hospitalaria, al contabilizarse 452 personas ingresadas, doce más que la víspera. Y en Madrid, donde se registró un único fallecido y 149 nuevos contagios, sin embargo, aumenta el número de pacientes hospitalizados en planta (de los 396 del sábado a 413 de ayer) y los ingresados en UCI, que son 195, tres más que el sábado.

Más allá de estos tres casos, y a tenor de los datos, la situación epidémica en la gran mayoría del Estado sigue manteniendo esa tendencia positiva, relacionada con los avances en la campaña de vacunación.