Llevar a las mujeres reclusas libros dedicados por personas desconocidas que los donan para que sean un regalo personal y personalizado, así podría definirse el proyecto "A las olvidadas", de la Asociación Teta&Teta, que este miércoles ha llegado al Centro Penitenciario de Pamplona, en colaboración con el C.I. Escuela de Educadoras y Educadores - Hezitzaile Eskola I.I. y la Dirección General de Justicia del Gobierno de Navarra.
23 mujeres presas en la cárcel de Pamplona han recibido sus libros y, además, han tenido ocasión de asistir a un acto cultural participativo, con un recital de Ajo Micropoetisa e ilustraciones en directo de la artista Tuchi.
Para la Dirección General de Justicia, acciones como esta se enmarcan en las Líneas Estratégicas del Modelo Navarro de Ejecución Penal, que se presentaron en febrero de 2021 y que constituyen la base para impulsar la reinserción de todas las personas condenadas en Navarra.
Este modelo establece como uno de sus principios básicos el de incorporar la perspectiva de género, lo cual supone la necesidad de desarrollar actividades específicas para las mujeres presas, dado que la prisión es un medio en el que las mujeres están en una posición muy minoritaria. La mejora del acceso a la cultura y el incremento de lazos con la sociedad civil son otras de las finalidades que se cumple con este proyecto. Así lo ha destacado Elena Lacosta, Jefa de Sección de Ejecución Penal de la Dirección General de Justicia, que ha asistido al acto junto a 6 personas de la Asociación Teta&Teta y 7 representantes de la Escuela de Educadoras y Educadores.
Cabe destacar, además, que desde el Gobierno de Navarra se está colaborando con el centro penitenciario de Pamplona para que la biblioteca del mismo trabaje estrechamente con la Red de Bibliotecas Públicas de la Comunidad Foral.
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Una iniciativa para la reflexión
El proyecto "A las olvidadas", de la Asociación Teta&Teta, pretende acercar la cultura a las mujeres reclusas, dándoles herramientas en forma de libros que les permita alejarlas de su realidad, al tiempo que se visibiliza a un colectivo que se considera discriminado por el sistema penitenciario.
"A las olvidadas" se define como una iniciativa "feminista, cultural, solidaria, poética y, sobre todo, transformadora, dentro y fuera de las prisiones". No se trata únicamente de una recogida de libros, puesto que estos deben estar dedicados, por las personas donantes, con mensajes de apoyo a las mujeres que se encuentran en prisión.
La acción en el centro penitenciario de Pamplona ha contado con la colaboración de la Escuela de Educadoras y Educadores, cuyo alumnado de 2º curso de Integración Social contactó con la Asociación Teta&Teta en el contexto de las celebraciones del 8 de marzo. A través de diferentes medios, llevaron a cabo la búsqueda de los libros, y de las personas donantes que incluyesen su dedicatoria en los mismos.
Las dedicatorias, "esencia de la iniciativa"
Según las impulsoras de la acción, "las dedicatorias son la esencia de la iniciativa". "Son el abrazo, el >, el >, la demostración de que alguien ha pensado en ellas. La cárcel deshumaniza mucho a las personas y las dedicatorias de alguna manera devuelven algo de esa humanidad. Si aquí fuera ayudan a reflexionar, allí dentro reconfortan", explican en su página web.
La capacidad transformadora de la iniciativa también sale hacia afuera de los muros de las cárceles, al romper estereotipos y despertar "reflexión y empatía".
Además de colaboraciones puntuales, como la protagonizada en este caso por el Gobierno de Navarra y la Escuela de Educadoras y Educadores, el proyecto "A las olvidadas" cuenta con el apoyo de Fundación Gabeiras, Fundación Carasso y el Ministerio de Cultura. La colaboración del Centro Penitenciario de Pamplona y de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias ha sido también imprescindible para llevar a buen puerto esta iniciativa.
