El próximo lunes la Sección Primera de la Audiencia de Navarra abrirá el juicio por una violación grupal a una joven con discapacidad psíquica ocurrida en la localidad de Orkoien el 29 de noviembre de 2019, cuando la víctima tenía 23 años.

El fiscal solicita 54 años de prisión para cada uno de los cuatro acusados como presuntos autores de un delito de agresión sexual. Pide 15 años de prisión para cada uno, y otros 13 como cooperadores necesarios en la violación de los otros tres acusados, lo que suma otros 39 años.

Para un quinto inculpado, el fiscal reclama un total de 52 años de prisión (13 años por cada delito como cooperador necesario).

Los cinco son de origen marroquí, carecen de antecedentes, se encuentran en situación irregular y son residentes de la localidad de Cadreita.

En su escrito, la Fiscalía indica que la víctima, que padece retraso mental moderado por el que tiene reconocida una discapacidad del 67 %, sufre desde entonces trastorno por estrés postraumático.

El 17 de noviembre de 2019, a través de la red social Badoo, la joven contactó con uno de los acusados, Y.H., mayor de edad, quien le pidió su whatsapp, igual que hizo el día 20 cuando contactó con ella de nuevo en Badoo, facilitándole la chica el número de su móvil.

El día 22 el acusado le hizo una videollamada que duró más de 5 minutos y además facilitó el número de la joven a T.E.D., también acusado, quien llamó a la víctima los días 25 y 26 con la intención de conocerla y "mantener relaciones sexuales", dice el fiscal, que añade que en esos días también se comunicó con ella por whatsapp.

El día 28 repitieron los contactos con la misma finalidad de mantener relaciones sexuales tanto T.E.D. como Y.H., M.B., I.B. y A.B., según precisa el fiscal, que subraya que los dos primeros "percibieron" en sus contactos la discapacidad de la joven y "se lo comunicaron" a los otros tres, por lo que todos sabían de su "vulnerabilidad".

En el escrito de acusación el fiscal añade que fue T.E.D. el encargado de quedar con la chica "para mantener relaciones sexuales por turno" y "sin excluir el uso de la violencia o intimidación para vencer posibles resistencias".

Finalmente quedaron el día 29 en el bar El Prado de Orkoien, al que acudieron tres de los cinco acusados, mientras que los otros dos se unieron al grupo en el parque Argia

Allí, "mientras la agredían sexualmente por turnos, tal como los acusados habían planeado", la víctima se sintió "atemorizada por la superioridad numérica de los mismos, el lugar apartado donde se encontraban, y su propia vulnerabilidad debido a su discapacidad, circunstancias que determinaban que se encontrase totalmente a merced de los acusados", sostiene el fiscal.

Y destaca que antes de marcharse T.E.D le preguntó si tomaba la píldora y al responder ella que no "el se enfadó" y le dijo "tú lavar ropa" y "si cuentas algo vengo otra vez y te lo hago".

Al día siguiente el acusado contactó de nuevo con ella por whatsapp, aunque solo dijo "hola", y ese mismo día la joven acudió a urgencias de obstetricia y ginecología donde le realizaron una exploración en la que no se apreciaron hematomas pero sí sendas lesiones eritematosas de un centímetro cerca de un pezón y dos desgarros en la entrada de la vagina.

Por su parte el médico forense confirmó la penetración vaginal y anotó que los desgarros simétricos en la vagina son poco frecuentes y pueden deberse a "escaso flujo vaginal", "un miembro viril de grades dimensiones" o "un objeto de aristas simétricas".