Una patrulla de la comisaría de Elizondo intervino este sábado para rescatar a un perro deshidratado que había sido encerrado en el remolque de un turismo.

Los hechos se conocieron cuando un ciudadano llamó a la Policía Foral para informar de que en Oronoz se encontraba un vehículo cerrado con un transportín al sol en el que temía por la vida de un perro encerrado.

La patrulla movilizada al lugar comprobó que efectivamente el animal permanecía en una jaula sobre bola de remolque con escasa ventilación y expuesta a una temperatura ambiente de 30 grados, por lo que se procedió a abrir la jaula a la vista de que el animal no respondía. En la misma se encontraba un perro de caza con signos de deshidratación y shock térmico, por lo que los policías comenzaron a refrescar al animal, mojándolo e intentando que bebiese agua. El can no reaccionó inicialmente, pero al poco rato comenzó a recuperar la vitalidad y a reponerse.

Cuando el propietario acudió al lugar, reconociendo que había salido a cazar dejando el vehículo con el perro a la sombra, se le informó que iba a ser denunciado por una posible infracción a la Ley Foral 19/2019 de animales de compañía, por una posible falta grave al actuar sin diligencia y dejar al animal en condiciones que ponían en riesgo su vida.