La Policía Foral ha imputado a un conductor que, tras serle inmovilizado el coche en San Adrián por circular bebido, utilizó una sierra para cortar el volante y liberarse del cepo que habían colocado los agentes para que no circulase.

Los hechos tuvieron lugar durante la madrugada de este martes, cuando agentes de la Policía Foral adscritos a la comisaría de Tafalla pararon un turismo cuyo conductor arrojó una tasa constitutiva de delito en la alcoholemia que le efectuaron, al triplicar el límite permitido. Por este motivo, los agentes le colocaron un cepo de volante al vehículo e imputaron un delito contra la seguridad vial al hombre.

COARTADA FALSA

Dos horas después de la inmovilización, los agentes acudieron al lugar donde estaba el turismo y comprobaron que ya no se encontraba allí. Pasado el mediodía, el propio conductor imputado telefoneó a los policías forales para pedirles que acudieran a levantar la inmovilización y afirmó que le habían robado el cepo del volante.

Los agentes comprobaron que el volante del coche había sido serrado y que ya no estaba el cepo, momento en el que advirtieron al hombre de que podía ser imputado por un delito de hurto o de daños. Seguidamente, el conductor devolvió el cepo que supuestamente él mismo había retirado tras cortar el volante y fue imputado por otro delito de quebrantamiento.