El Juzgado de Instrucción número 4 de Pamplona condenó el pasado viernes de conformidad al camionero, vecino de Guadalajara de 51 años y de nacionalidad búlgara, que fue interceptado la semana pasada por agentes de la Policía Foral en la N-121-A a la altura del puerto de Belate con una rueda del semirremolque reventada y que sextuplicó la tasa de alcohol al someterse a la etilometría correspondiente.

El camionero fue condenado a una pena de multa de 720 euros y a la privación del carné de conducir durante 244 días, algo más de 8 meses.

La resolución declara probado que el conductor, sobre las 23.50 horas del 15 de noviembre de 2021, conducía el camión por el kilómetro 37 de la N-121-A pese a haber perdido una rueda del semirremolque que arrastraba, y tras haber ingerido sustancias alcohólicas en cantidad suficiente como para queda incapacitado física y psíquicamente para conducir, con grave riesgo para la circulación.

LA LLANTA ROZABA EL ASFALTO

Los policías sospecharon que con la rueda en dicho estado la carga estaba mal estivada. Pero a la vez observaron que zigzagueaba en su marcha y soltaba chispas desde su parte central. Por ello le dieron el alto a la altura de Zozaia para su control y confirmaron que una rueda estaba reventada y la llanta rozaba con el asfalto.

Por este motivo fue requerido por agentes de la Policía Foral, quienes le sometieron a la prueba de alcoholemia en aire espirado, en la cual arrojó sendos resultados de 0,93 y 0,91 miligramos de alcohol. Conviene recordar que en los conductores profesionales la tasa legal de alcohol es de 0,15 mg por litro de aire espirado.

Además en el encausado era patente su incapacidad para conducir correctamente, que se deducía a partir de los siguientes síntomas: olor a alcohol, habla pastosa, disminución de reflejos y conciencia aturdida.