PAMPLONA "Ha sido una pena porque los jugadores han estado muy metidos, muy mentalizados, con muchas, ganas, haciendo un esfuerzo grande, pero no hemos tenido el día de lucidez para jugar con un poco más de tranquilidad", ha asegurado en rueda de prensa después del partido en el pabellón Anaitasuna.

El técnico del Helvetia ha insistido en que "no hemos tenido un día tranquilo para aprovechar las oportunidades que hemos tenido".

Ha mencionado que en líneas generales han defendido "bastante bien, quitando el inicio de la segunda parte" que con el 5-1 avanzado "ha flojeado un poco".

El defecto que ha visto es la "precipitación y no tranquilidad para resolver las situaciones con más calma" en ataque durante el primer tiempo.

En la segunda parte, tras el intercambio de goles inicial "que no nos interesaba porque no reducíamos la diferencia de goles", se han encontrado "más arropados en defensa" y a punto de "meternos en el partido".

No obstante, ha definido como "impresionante" el partido del guardameta visitante Rodrigo Corrales en el momento clave para conseguir el empate. Sus paradas, la "ansiedad y los nervios" les han perjudicado.

Aitor Etxaburu ha destacado el partido del equipo rival: "ha jugado un partido muy correcto, un gran partido". El entrenador guipuzcoano cree que "nos ha sabido jugar" imponiendo un ritmo "pausado" que les interesaba.

No les queda otra que "seguir trabajando". Ha calificado la situación de su equipo como "difícil, tras perder en Sagunto y ante Huesca".

Cree que no están "ni muy lejos ni muy cerca de ningún lado" en la clasificación, pero es un "pequeñito traspiés". El objetivo inicial que se marca es "recuperar a la gente y esperar a nuestra oportunidad".

El entrenador del Helvetia se ha referido a la lesión del pivote Alejandro Garza, que hoy no ha podido jugar: "Es una roturilla de fibras en la fascia del pie". Se perderá el partido del martes en Barcelona y el encuentro ante el Cuenca del día 27 de octubre.