Nike rompe con Armstrong
la empresa rescinde su contrato al sentirse "engañada" por el ciclistaEl texano a su vez dimite de la presidencia de la Fundación Livestrong que creó para ayudar a enfermos de cáncer
WASHINGTON. La compañía Nike anunció ayer que da por terminado su contrato con el ciclista Lance Armstrong, quien, a su vez, dimitió de la presidencia de la fundación benéfica que creó, Livestrong.
"Debido a las pruebas, aparentemente indiscutibles, de que Armstrong participó en el uso de drogas y engañó a Nike durante más de una década, es con gran tristeza que hemos puesto fin a nuestro contrato con él", indica un comunicado difundido en el sitio web de la empresa. "Nike no justifica el uso de drogas ilegales para la mejora del rendimiento (deportivo) en manera alguna", añade la compañía.
El comunicado agrega que Nike "seguirá respaldando las iniciativas de Livestrong para unir, inspirar y alentar a las personas afectadas por el cáncer".
Esta fundación proporciona servicios para pacientes y supervivientes de cáncer y sus familias. Armstrong, siete veces ganador del Tour de Francia, ha sobrevivido a un cáncer testicular.
"En 1996, cuando mi tratamiento del cáncer se aproximaba a su fin, creé una fundación para servir a las personas afectadas por esta enfermedad", señala Armstrong en un comunicado distribuido por Internet y en el cual agradece a la fundación su "trabajo tan duro y excelente en los últimos quince años".
"Para ahorrar a la fundación cualquier efecto negativo como resultado de la controversia que rodea mi carrera ciclista, pondré fin a mi presidencia", agrega
HAMILTON, ROTUNDO El exciclista estadounidense Tyler Hamilton recordó que "hubo mucha gente implicada" en los casos de dopaje del pasado, y aseguró que su compatriota Lance Armstrong, cuya negación sigue sin entender, no fue culpable "al 100%". "El deporte era muy sucio en ese momento. La mayor parte de las cosas que hicimos eran la norma en ciclismo. Él (Armstrong) tomó la decisión de doparse, pero no es su culpa al 100. Hubo mucha gente implicada en esto", señaló Hamilton. En este sentido, el americano, que compartió equipo con el tejano durante cuatro campañas, reconoció que "estaría sorprendido si no hubiese confesado de algún modo, algún día, porque continuar con la negación es un peso muy, muy pesado".
Además, lamenta la existencia del Código de Silencio. "No me siento mal por mí. He visto a muchos profesionales contra los que he corrido que están negándose a sí mismos o negando haber visto o escuchado algo sobre el dopaje. Si dicen que no se doparon, ok, hasta donde yo sé no lo hicieron, pero decir que no vieron o escucharon algo... Es parte del problema, la omertá todavía existe. Prefieren enterrar sus cabezas en la arena, lo que es imposible", advirtió.
"Necesitamos más gente que salga y hable sobre lo que sucedió. Lo que me enferma es la negación, aquellos que dicen que no sabían nada, los mánagers, los directores deportivos, los masajistas, mecánicos y los corredores que todavía compiten", prosiguió al respecto. Uno de estos ciclistas podría ser el kazajo Alexander Vinokourov, sancionado dos años por dopaje y que conquistó el pasado verano el oro olímpico en Ruta en Londres 2012. "No digo que debería haberlo dejado, pero si no son honestos sobre lo que sucedió en el pasado, entonces no hay espacio para ellos en el deporte", confesó.