Sería necesario un camión blindado para trasladar los tesoros logrados en Madrid por el ciclismo vasco. El acopio de metales comenzó el viernes con las cronos. Markel Beloki, apenas 18 años, de estreno en el profesionalismo, completó una contrarreloj sensacional para obtener la plata. Solo David de La Cruz pudo con el gasteiztarra, que el pasado curso lograba el título júnior y apenas un almanaque después pudo codearse con los profesionales, entre lo que destacó.

En categoría sub’23 el título recayó en Aitor Agirre. El zumaiarra, del Laboral Kutxa, corría con el maillot de la selección vasca. Se colgó el oro de la disciplina certificando que el trabajo que se realiza en la cantera continúa siendo bueno. Eneritz Vadillo logró la plata en la crono sub’23 de féminas.

Inmejorable fue la respuesta de Usoa Ostolaza en la prueba de ruta femenina. La zarauztarra se proclamó campeona de España después de un final apoteósico en el que remontó a Mavi García. Ostolaza, reciente ganadora en la cima del Aubisque, victoria que le validó el triunfo final en el Tour de los Pirineos, está demostrando que es una de las mejores ciclistas del panorama estatal. Eneritz Vadillo se hizo con el título élite.

En el cierre de los campeonatos, con la cita masculina, Alex Aranburu obtuvo el oro y Oier Lazkano se quedó con la plata. Doblete vasco en el podio. Además, Ander Ganzabal, del Laboral Kutxa, lograba el título élite. Una demostración de la solidez del ciclismo vasco, que reivindicó su jerarquía en Madrid.